Las existencias ejemplares también son borradores.
Más que ocultación, la máscara concede otra identidad.
Los discursos vacíos crean vínculos estériles entre las palabras.
Pasan años abriendo itinerarios; los que llegan olvidan el camino de vuelta.
La imaginación enseña a desconfiar de lo real.
El insomnio acumula ruidos con cautelosa paciencia.
Los crepúsculos recogen días que se van sin decir nada.
Creamos obras y dejamos recuerdos, pero la vida nos borra el camino de vuelta.
ResponderEliminarLos amaneceres quitan la tapa de los días sin estrenar.
Un abrazo. César.
Querido César, somos tiempo y el paso de los días nos va despojando de las hojas secas. Quedan los afectos y la calidez de amigos como tú. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarAsociación libre...Buena base.
ResponderEliminarLa fantasía es la loca de la casa.
Besos.