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| Grises |
SIMULACIONES
Cada
náufrago reclama para sí la madera raída.
Alguien
escribe. Soy parte de la trama. Un personaje episódico.
Estoy
aquí, creo, aunque desconozco la ubicación exacta del aquí.
Los
aforismos marcan la piel del agua, como la huella frágil de una verdad.
Para la
confidencia íntima, personal, directa, un tono de voz sobrio alejado del
aspaviento.
Percibo
contornos con la precisión ambigua del miope.
Cada día
el desconcierto, la indagación sobre una realidad cambiante y fragmentaria.
Con los
años el escepticismo muda en benevolencia.
Sucede
que regresas cada vez que te nombro.
No sé
apaciguar mi obsesión por relojes y calendarios.
En la
íntima discordia entre el yo y la nada, tomo partido.
Un
nombre propio que acumula letras en minúscula. Nadie, en suma.
Mientras
busco, dejo abierta la puerta para el regreso.
(Del libro Motivos personales, La Isla de Siltolá, Sevilla, 2015)
Cada vez que leo tus aforismos, hay alguno que me llama más la atención que otras veces José Luis.
ResponderEliminarHoy me quedo con el 3, el 9 y el 12. Todos, siempre, magníficos!
Que tengas un buen comienzo de semana José Luis,
Sandra.
Muchas gracias por tu amistad y siempre encantado por tu lectura. Cada texto reclama una mirada. Abrazo fuerte.
EliminarLos aforismos de "Motivos personales" son tan intensos, que se transforman en pequeños poemas llenos de belleza y verdad. Un abrazo, José Luis.
ResponderEliminarQuerida María, qué bien encontrar tu mensaje en mis puentes. Ya sabes que me encanta el rigor del aforismo, su presencia, su belleza. Que tengas un excelente verano.
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