Contemplaciones (Paseo del Faro) Fotografía de Adela Sánchez Santana |
EXILIOS Y ENCUENTROS
Y
apenas ha quebrado el día de verano
ERIK A. KARLFELDT
Los exilios de verano dispersan compromisos literarios pendientes. Así
que opté por seguir conectado al ordenador, al menos en las primeras horas de
la mañana. En ese horario me apresuro a establecer algunas prioridades: cada
jornada, el ritmo vitalista del blog abre la sombrilla del quehacer creativo.
Avanza también, con paso sostenido, una edición prevista para octubre y hago
recuento de libros manuscritos que debo seleccionar para un concurso literario,
un asunto complejo en el que pongo la máxima atención. Otros proyectos se
desvanecen como neblina, por las peculiares circunstancias del gregarismo
estival.
La poesía perdura, como amalgama cohesiva de mis lecturas.
En el intercambio de mensajes del correo electrónico percibo una
aceptable cortesía social, pero también una oquedad distante, como si el afán
de acotar su espacio personal necesitara definirse ante otros cercanos. No voy
a convencer a nadie; ya consumí mi etapa proselitista. Me parece bien que
alguien quiera ser enjambre de una única abeja. Tampoco me preocupan las
esperanzas en fase de disolución. La amistad adquiere consistencia cuando teje
una fértil telaraña de afinidades. No es el caso.
(apuntes de verano, agosto, 2018)
estos puentes siguen en el tiempo por la entrañable fuerza que dejan en sus escritos la compañía de amigos como María Fernández C., Gabriela Rosas, Gloria, José Antonio, Luis Miguel, Paco, Concha, Beatriz... Y tantos amigos que permiten llenar cualquier exilio de encuentros.
ResponderEliminarDeja la puerta de la palabra abierta para que las fronteras y los límites, vengan estos de donde vengan, acaben desapareciendo. Vengo de una Penitenciaria de leerle poemas a los presos. Cuanta ansia de palabra! Cuanta necesidad de poesía salvadora!! Seguiremos amigo. Abrazos!!
ResponderEliminarMuchas gracias por tu amistad Luis y enhorabuena por esa lectura en un sitio tan especial. Me alegra saber que la poesía allí también es ventana y compañía.
ResponderEliminarAl hilo de la imagen que acompaña al texto, y dada la proverbial falta de respeto sobre la labor ajena, destacó aquí las fotos de Javier Cabañero Valencia, Rosa María Hernández Cuesta, Hilario Barrero, José Manuel Vilaboa y Adela Sánchez Santana, que han establecido con mi escritura un incansable diálogo repleto de amistad y belleza. Gracias de corazón.
ResponderEliminarTú eres encuentro y palabra fértil. Tus puentes son lugar de bienvenidas y tu amistad una casa grande con vista al mar para quedarse. Gracias por dejarme estar. Por tu amistad y por tu poesía. Por tu palabra.
ResponderEliminar¡Abrazo grande!
Hola poeta, feliz de sentir la fuerza de tu compañía y con la esperanza de un abrazo fuerte lleno de libros y palabras, lleno de afecto.
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