Nevada Fotografía de Madrid Secreto |
MONÓLOGO DE REPLICANTE
CON NIEVE
Muy sofocado por ese continuo primer plano
en los medios de la nevada en Madrid que
ha ofendido tanto a preclaras sensibilidades poéticas y prosaicas. Perdón,
perdón, perdón –tres veces tres, como San Pedro el cerrajero- por esa evidente
carencia de objetividad testimonial ante otras situaciones del suelo patrio peninsular… Se entienda como causa
de nuestra frustración televisiva que las principales cadenas informativas tienen sede en
Madrid y, por tanto, es más fácil dar noticias del sitio que trasladarse al
Somontano con las vías cerradas; que así mismo se ubica aquí palacio, presidencia,
gobierno y el ministerio correspondiente, con portavoces, portavozas y todo lo
demás… La verdad es que el vuelo desasosegante de los copos no borra en absoluto, sean o no noticia de prensa, nuestra solidaridad ni nuestra comprensión de situaciones similares que tendrían merecida portada, dignas de titular y primer
plano. Solo un esqueje de queja ante la insurgencia protestona: lo que de verdad queremos en Madrid es ser
periferia alguna vez.
El asalto al Capitolio de la truculenta
ultraderecha, disfrazada de carnaval, era tan previsible como las golondrinas
de Bécquer. El plenirrubio golfero del tupé lleva cuatro años de incontinencia
mental y los sumideros cerebrales de tanto fervor seguidista acaban colapsados.
Pero esa demencia senil no mancha al
gran país que es USA, ahora objeto de todo tipo de tropelías verbales de
palurdos y resentidos que confunden la parte por el todo. La oveja negra no es
el rebaño (de bisontes).
Los virus siguen
sueltos y en crecida, la irresponsabilidad de muchos también; decía Jaime Gil
de Biedma que el invierno que viene será duro, y sería conveniente añadir coda y estrambote: la primavera y el verano,
también…
Lo bueno de hacer
reseñas es que algunas veces el autor reseñado lo agradece con la calma apacible de la cortesía. No siempre, claro, pero de cuando en cuando llegan palabras seguidas de gratitud que animan a seguir dos o tres pasos más en
esto de dedicar el tiempo casi completo a la lectura de libros ajenos.
Creía que el año nuevo
propiciaría hábitos de concordia y tolerancia; soy un caso; más que un
replicante terminal que ha visto cosas que nadie creería, más allá de Orión, en el parque natural del vivir encarno al iluso perpetuo en fase de crecimiento.
(Apuntes del
diario)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.