lunes, 24 de mayo de 2021

OTRA CIUDAD, LA MISMA


 

OTRA CIUDAD, LA MISMA
 
En este mundo, nada está en su sitio,
empezando por el propio mundo.
 
EMILE CIORAN
 
 
.  Es la segunda semana sin confinamiento y las aceras congregan un contagio de prisas. La certeza de la nueva normalidad se tensa con la esperanza de que el verano tenga una sonrisa plena de sombrillas desplegadas y azules Vuelco a Ávila, otra ciudad, la misma, en la que cada piedra se hace pensamiento desmandado, Como si caminase a trasmano, pongo lentitud en la mirada y en los zapatos. Tengo la cabeza y el corazón a pájaros.
 
. Alguien habla en voz alta. Otro asiente a intervalos. Una multitud conectada con un oído atento en la distancia. Sólo yo permanezco fuera de cobertura. Quité el sonido al móvil y cuando lo enciendo me he perdido seis llamadas, y una nube de mensajes me recuerda los asuntos literarios que hay que programar. Debería ayudarme más a mí mismo; solo, no puedo.
 
. Pido un café con leche y abro un libro. Apenas leo unas líneas. Elijo un ventanal que testifica el tránsito incesante. Frente a mí un asiento vacío y esa caligrafía de la ausencia que escribe en lluvia oblicua. Otro cuaderno blanco que pide la escritura del poema. Y yo no estoy.
 
. En cada calle, el niño que yo fui, la voz que permanece anclada a la memoria. Los ojos en la epidermis mansa de otros días.
 
(Apuntes en Ávila)


6 comentarios:

  1. Nada está en su sitio... Somos nosotros quienes estamos descolocados muy posiblemente. Interesante este apunte desde la ciudad de Ávila. Hay corazón y grata escritura.
    De Ciorán lo leí todo o casi todo. Interesantísimo filósofo.
    Saludos.

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    1. Buenos días, Teo, muy agradecido por tu reflexión y comparto tu punto de vista; somos nosotros los protagonistas del cambio continuo, por eso nuestra percepción de los sitios que amamos, donde se cobijan pasadoy afectos, es otra. Y buena lectura Cioran; su nihilismo desasosiega, pero es un magisterio necesario para no dormir en lo prescindible. Fuerte abrazo.

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  2. "Frente a mí un asiento vacío y esa caligrafía de la ausencia que escribe en lluvia oblicua. Otro cuaderno blanco que pide la escritura del poema. Y yo no estoy".
    Una belleza, fuerte abrazo.

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    1. Buenos días, Gabriela, un viaje familiar en este tiempo de regreso ha marcado la agenda de estos días; seguimos en esa textura afectiva de lo necesario que hace de las obligaciones afectivas la única tarea. Seguro que mis libros y mis amigos sabrán disculparme. Gracias y un gran abrazo.

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  3. La ausencia es necesaria en ese espacio de la creación. Aunque no estemos, el poema nos espera. Presiente nuestros pasos.

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    1. Plenamente de acuerdo, así que en esa espera seguimos en las calles de una ciudad que enlaza recuerdos y presente, con calles siempre intactas, distintas, renacidas. Un gran abrazo.

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