Con Irene, en la librería Alberti (Madrid) |
ACERCA DEL SUEÑO (II)
Para Irene, en su cumpleaños
Hay sueños que una noche
consumen su existencia
y otros que se prolongan con los días.
Simulan los primeros
una especie común de lepidópteros,
y acaban siendo pasto
del trastero y del polvo,
como un experimento vanguardista,
o una prenda de abrigo
en la inclemente fiebre del verano.
Levísimos planetas alumbran los segundos,
como estrellas fugaces que convocan
múltiples y azarosas travesías.
Ante nuestra mirada
sus figuras componen
un paisaje celeste,
intangible materia en sereno reposo
donde habita la luna del deseo.
Causas y efectos, Sevilla, 1997
Pocas cosas hay en la vida que ten den mayor satisfacción que los hijos, al final los miras como reflejo de lo que uno ha vivido y de como lo ha hecho. Me llega, pues mi hija se casa en Julio -aunque ya viva con su pareja desde hace dos años-, y todo empieza a encajar en su sitio. Un abrazo amigo para ti. Esta semana seguramente ya sabré el desenlace de mi trabajo, no corro peligro pero se anticipa desastre, ya te contaré.
ResponderEliminarQuerido paco, nos escribimos y espero de corazón que esa situación laboral no sea desastre sino salida a un campo de optimismo. Los hijos son lo mejor que tenemos, no sólo porque dan sentido a la existencia diaria sino porque aportan cada día un montón de razones para seguir en pie. Un fuerte abrazo.
EliminarEL HIJO-Pablo Neruda
ResponderEliminarAy hijo, sabes, sabes
de dónde vienes?
De un lago con gaviotas
blancas y hambrientas.
Junto al agua de invierno
ella y yo levantamos
una fogata roja
gastándonos los labios
de besarnos el alma,
echando al fuego todo,
quemándonos la vida.
Así llegaste al mundo.
Pero ella para verme
y para verte un día
atravesó los mares
y yo para abrazar
su pequeña cintura
toda la tierra anduve,
con guerras y montañas,
con arenas y espinas.
Así llegaste al mundo.
De tantos sitios vienes,
del agua y de la tierra,
del fuego y de la nieve,
de tan lejos caminas
hacia nosotros dos,
desde el amor terrible
que nos ha encadenado,
que queremos saber
cómo eres, qué nos dices,
porque tú sabes más
del mundo que te dimos.
Como una gran tormenta
sacudimos nosotros
el árbol de la vida
hasta las más ocultas
fibras de las raíces
y apareces ahora
cantando en el follaje,
en la más alta rama
que contigo alcanzamos.
Feliz cumpleaños, Irene.
Felicidades por ser padre, José Luis.
Gracias querido amigo, sabes por Daniel qué es compañía, afecto y gratitud. Así que en esas vivencias compartidas, tu palabra es un regalo.
ResponderEliminar¡Qué bello poema, José Luis! Me llega esa felicidad de ser padre, universo de sueños presentes y futuros.
ResponderEliminarDoble felicitación a Irene: por su cumpleaños y por tener un padre como tú.
Y felicidades para ti por tener una hija que te hace soñar.
Un abrazo.
Eres un encanto, Fanny, no sólo por lo que me enseñas cada día con tus haikus, sobre todo por el afecto que me demuestras en cada puente escrito. Besos cordiales.
EliminarFelicidades por padre y por poeta.
ResponderEliminarY que esa felicidad también te toque a ti por tu amistad, es siempre un alegría hacer el viaje de lo cotidiano arropado por los sentimientos y la alegría de los demás. Abrazos.
EliminarUn lector, Joan, me pregunta por el poema en su versión incial; es verdad, el poema se titula "Acerca del sueño", está dedicado a Irene, y tiene dos partes; he preferido poner sólo la segunda por cortesía hacia el lector, para no dilatar la entrada. Sin duda, habrá ocasión para subir el primero. Y también es cierto lo que me recuerda. Mi libro "Causas y efectos" ganó el Premio Internacional de poesía Luis Cernuda, convocado por el Ayuntamiento de Sevilla. Fue una de las experiencias más gratas de mi escritura. Todavía lo recuerdo. Gracias, Joan, por tu precisión...
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