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viernes, 2 de septiembre de 2022

LECTURAS DE VERANO


 LECTURAS DE VERANO

   La amanecida de septiembre huele a rutina y búsqueda. Es necesario levantar el campamento de verano y poner rumbo a las tareas pendientes. Recojo libros y percibo que siempre elijo títulos a contramano, como si el criterio lector se alzara libre, sin presiones ajenas. Así que anoto aquí algunas compañías verbales de estas semanas. Vinieron conmigo dos libros esenciales, In nomine Auschwitz. Antología de la poesía del Holocausto, el magno balance de Carlos Morales del Coso (Citma, Última Línea, 2022) y Un buen puñado de ideas. G. K. Chesterton (Renacimiento, 2018). Y el cuerpo de trabajo sobre la poesía más joven con más de veinte libros de voces emergentes. También estuvieron cerca los libros de Jesús Montiel y David Delfín. Pienso ahora que ha sido una hermosa compañía, alentada por la paciencia de quien vive conmigo. Ella sabe que la única herejía es no leer.





 

lunes, 22 de agosto de 2022

LA ESCRITURA Y SUS DEMONIOS

Playa de la Concha
Oropesa del Mar, Castellón
Fotografía
de
Oficina de Información Turística

 

LA ESCRITURA Y SUS DEMONIOS

 
MARIA PAZ G. SANTANA.

   La biografía profesional de José Luis Morante (El Bohodón, Ávila, 1956) integra casi cuatro décadas de dedicación a la docencia y una prolija cosecha literaria que multiplica géneros y publicaciones. Con el poeta abulense hablamos en su retiro de Oropesa del Mar, en Castellón, donde continúa con los hábitos de siempre: lecturas, reseñas críticas y creación personal, mientras completa sus compromisos literarios de otoño.
 
¿El escritor vive de espaldas a lo diario?
 
Lo cotidiano es el gran escaparate que surte la despensa creadora del escritor. Por tanto, congeniar con lo contingente es una tarea ineludible, que no admite excusas. Quien habita el taller literario no es un misterioso ectoplasma, es una presencia que está dentro de lo real y lo doméstico constituye su medio natural, su casa.
 
¿Qué impulsa a escribir?
 
Se me disculpará esta enumeración caótica. Vivencias, lecturas, emociones, imágenes, audiciones musicales, obsesiones, carencias y estados de ánimo. Un semillero tan fértil que a diario multiplica su onda expansiva.
 
¿Hay cárceles de tinta?
 
Claro, la literatura también tiene sus callejones sin salida. Hay que saber escapar de la prepotencia intelectual, a la que nos tienen tan acostumbrados los erasmus del dogmatismo y los multipredicadores domésticos; y hay que buscar salidas de urgencia al plagio y al autoplagio, que es una forma extrema y lastimosa de la reiteración. La crecida digital ha multiplicado otras trampas: la manipulación ideológica, la desinformación laberíntica y la codificación de un pensamiento único, uniforme, aséptico, de digestión apresurada.
 
¿Qué queda por aprender, tras una trayectoria tan poblada?
 
Casi todo, no se debe renunciar jamás al aula abierta del aprendizaje; la realidad está llena de recovecos inexplorados y guarda dentro un paisaje transcendido que integra otros itinerarios insólitos. Así que el nomadismo es condición natural de quien escribe.
 
¿Indicios de nuevos proyectos?
 
El tiempo de otoño añade una nutrida página de novedades; hay algunas ediciones a punto de salir, en noviembre sale un nuevo poemario en Puerto Rico y conspiro para que una antología vea pronto estación de llegada en una editorial madrileña. En fin, el sosiego de los termómetros otoñales será necesario para afrontar tantas tareas pendientes.
 
Gracias por buscar un hueco a mis preguntas en este lugar que solo invita a mirar las olas

El diálogo con el mar siempre es compatible con las palabras. El tiempo vacacional cambia las localizaciones, pero preserva los hábitos y yo, como afirmara G. K. Chesterton, “Nunca he tomado en serio mis libros, pero tomo muy en serio mis opiniones”. Muchas gracias por la buena salud de las preguntas.