Plaza Mayor de Madrid, marzo 2013 |
El poema, contra todo pronóstico,
burló el feroz asedio de la noche.
Perdió en la fuga varias metonimias,
una excelsa metáfora,
fragmentos de una elipsis
y dos comparaciones ajadas por el uso.
Pero salvó sin mácula el misterio,
el latido tonal de la emoción
y un argumento breve, necesario,
para no aparecer como un asunto
nebuloso y hermético.
Después se tendió al sol de la mañana
y tomó nuevas fuerzas para el viaje
campo a través de la caligrafía.
Del futuro destino hallamos rastros
en cierta librería anticuaria,
o en los ojos de un joven que sospecha
que acaso pueda repetir la huida.
(De Causas y efectos, Sevilla, 1997)
Jajajaja,.Qué bueno el final, me encanta como lo terminas.
ResponderEliminarTu poema es contra viento y marea, con tintes de huida
y fuga a tiempo.
Un fuerte abrazo. Cuánto bien me hacen tus comentarios.
Te he escrito hoy a tu correo, querido Paco, porque es la mejor manera de romper esta distancia. Pero a mí también me resulta un estímulo vital tu continua presencia. El poema es esa voluntad que convierte la literatura en obsesión, en huida hacia el desierto blanco de la escritura.
EliminarUn fuerte abrrazo y feliz fin de semana.
Bien trenzada, José Luis, la génesis de un buen poema y esa hipótesis de futuro. Es un placer seguir leyéndote.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y un privilegio tener lectores de tu categoría. A veces el poema se pregunta así mismo si merece la pena seguir caminando en esa estampida de adjetivos, nombres y verbos. Y cuando el cansancio vence, otros están con la mano sobre el papel, repitiendo la huida.
EliminarUn abrazo cordial.
"Después se tendió al sol de la mañana
ResponderEliminary tomó nuevas fuerzas para el viaje"
Un poema muy bueno y que me refleja.
Feliz sol que llega.
Un abrazo
Es verdad, Jesús, vuelve la luz y un poco de optimismo necesario para el fin de curso. Gracias por el afecto continuo y el aliento de ánimo.
EliminarAbrazos cordiales desde Rivas.