Hola poeta, espero que esa convalecencia dé frutos sanos y ya estés paseando junto al Tajo y midiendo en sílabas los colores serenos del otoño. Un gran abrazo y feliz fin de semana.
Es un género plenamente actual que sirve para medir las incertidumbres del ahora con luz diáfana. Me alegra que te interese el tema. Ya sabes que me gusta mucho escribir aforismos. Un gran abrazo.
¡Porfa!, no te lleves las entradas tan pronto que tengo que armar un follón tremendo para ver lo que me contestas al comentario. Ponlo más fácil, anda.Gracias.
Pido disculpas por robarte tanto tiempo, Tracy. Procuro dejar las entradas un par de días, pero a veces se acumulan los textos y debo dar salida a nuevas entradas. Lo dicho: eres tan generosa con mi literatura que me da cargo de conciencia quitarte tiempo personal. Un fuerte abrazo.
Yo también a ti, el día se ha vestido de primavera y todo es un cántico celebratorio, como un buen poema de Eloy Sánchez Rosillo. Que disfrutes de la jornada.
La voz en los ojos. Hablar sólo mirando. La palabra en la vista. Sólo eso...cómo si fuera poco...(más lo deberíamos de practicar todos). Me ha encantado el haiku José Luis. Un abrazo! Sandra.
Y yo he disfrutado con tus aforismos, Sandra; me encanta percibir tu compromiso con la literatura. Un fuerte abrazo en un bosque de hadas. real, que espera todavía el regreso.
Hola Carmela, he pasado el fin de semana en la Sierra del Rincón, un bosquedal de la zona norte de Madrid. Vuelvo con el sosiego del paisaje en la mirada. Un gran abrazo.
Una de las propiedades del haiku es su tendencia al silencio inmediato, ese laconismo pleno que deja la voz a los elementos contemplados. Y suelo practicarlo con frecuencia porque es una propuesta de diálogo entre palabra e imagen. Muchas gracias por tu reflexión.
Miras... y ves. De ahí esas diecisiete sílabas luminosas.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y feliz fin de semana.
Hola poeta, espero que esa convalecencia dé frutos sanos y ya estés paseando junto al Tajo y midiendo en sílabas los colores serenos del otoño. Un gran abrazo y feliz fin de semana.
EliminarAyer estuve en una charla sobre narrativa y se habló, entre otras cosas, de aforismos. Me acordé de ti.
ResponderEliminarEs un género plenamente actual que sirve para medir las incertidumbres del ahora con luz diáfana. Me alegra que te interese el tema. Ya sabes que me gusta mucho escribir aforismos. Un gran abrazo.
Eliminar¡Porfa!, no te lleves las entradas tan pronto que tengo que armar un follón tremendo para ver lo que me contestas al comentario.
ResponderEliminarPonlo más fácil, anda.Gracias.
Pido disculpas por robarte tanto tiempo, Tracy. Procuro dejar las entradas un par de días, pero a veces se acumulan los textos y debo dar salida a nuevas entradas. Lo dicho: eres tan generosa con mi literatura que me da cargo de conciencia quitarte tiempo personal. Un fuerte abrazo.
EliminarEstupendo José Luis. Compartiendo mirada te deseo un feliz sábado. Un abrazo.
ResponderEliminarYo también a ti, el día se ha vestido de primavera y todo es un cántico celebratorio, como un buen poema de Eloy Sánchez Rosillo. Que disfrutes de la jornada.
EliminarGrata visita
ResponderEliminarmis ojos miran tus hojas.
Hoy solo veo,
me recreo,
comento, leo.
Hoy toca campo, otoño y familia, porque la provincia de Madrid está llena de enclaves donde noviembre parece una acuarela. Feliz domingo, Manuel.
EliminarLa voz en los ojos. Hablar sólo mirando. La palabra en la vista.
ResponderEliminarSólo eso...cómo si fuera poco...(más lo deberíamos de practicar todos).
Me ha encantado el haiku José Luis.
Un abrazo!
Sandra.
Y yo he disfrutado con tus aforismos, Sandra; me encanta percibir tu compromiso con la literatura. Un fuerte abrazo en un bosque de hadas. real, que espera todavía el regreso.
EliminarUna mirada lo dice todo. Hermoso haiku. Un abrazo.
ResponderEliminarA veces el silencio tiene más semántica que las palabras, querida amiga, y sabes que el haiku apuesta siempre por la economía. Un gran abrazo.
EliminarUna bella imagen, con pocas palabras que la acompañen bastan. Hermosas son las tuyas en este haiku. Abrazos
ResponderEliminarHola Carmela, he pasado el fin de semana en la Sierra del Rincón, un bosquedal de la zona norte de Madrid. Vuelvo con el sosiego del paisaje en la mirada. Un gran abrazo.
EliminarEl hayedo, el bosque, anima a caminar, ver, escuchar. Confirmemos la compañía y sigamos caminando.
ResponderEliminarUna de las propiedades del haiku es su tendencia al silencio inmediato, ese laconismo pleno que deja la voz a los elementos contemplados. Y suelo practicarlo con frecuencia porque es una propuesta de diálogo entre palabra e imagen. Muchas gracias por tu reflexión.
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