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domingo, 2 de abril de 2023

ACERCA DEL SUEÑO

La puerta de los sueños
(Madrid, 2021)
Fotografía
de
Rosa María Hernández Costa

ACERCA DEL SUEÑO                         

                     a mi hija Irene
  
I
      
Qué es el sueño, preguntas,
con la abrumadora ingenuidad
de quien me presupone una respuesta.
Y yo salvo el escollo
modulando una frase convulsa
en la retórica de los desconciertos.
Te digo: el generoso don
que la fatiga obtiene de la noche,
una brizna de luz escalando la sombra,
el envés de una historia
cotidiana y absurda;
tú misma, hija mía,
cada palabra tuya, cada gesto.
No sé si el sueño
es potestad del hombre
o comparten los sueños animales y cosas.
Ignoro de igual modo qué hilo teje
su textura de seda,
qué alzada confabula
su hermética apariencia
o qué brújula guía
la estela de sus viajes.
Sé que hay sueños tristes y gozosos,
oscuros y diáfanos,
ocasionales y obsesivos;
sé también que hay sueños tan hermosos
que el tiempo los indulta y perseveran,
y no envejecen nunca.
 
 
II
 
              A mi hija Ana

Hay sueños que una noche
consumen su existencia
y otros que se prolongan con los días.
Simulan los primeros
una especie común de lepidópteros
y acaban siendo pasto
del trastero y del polvo,
como un experimento vanguardista.
Levísimos planetas alumbran los segundos,
como estrellas fugaces que convocan
múltiples y azarosas travesías.
Ante nuestra mirada sus figuras componen
un paisaje celeste,
intangible materia en sereno reposo,
donde habita la luna del deseo.
 
                                        

                      (Ahora que es tarde, La Garúa, 2020)


martes, 29 de noviembre de 2022

CUARENTENAS Y ENSIMISMAMIENTOS

Madrid, otoño y grises
Fotografía de
Rosa María Hernández Costa

 

CUARENTENAS Y ENSIMISMAMIENTOS

 

Tras un trimestre de insólita actividad literaria, la realidad establece con precisa exactitud sus cuarentenas y ensimismamientos. En ello estoy mientras van pasando los días hacia dentro. El regreso a los hábitos de siempre será emotivo para la voluntad y el ánimo, para el sosiego de la lectura y de nuevos poemas: calle abierta. 

Hablo de ensimismamiento pero el concepto requiere matizaciones; he podido disfrutar de otras actividades. Sucedáneos para cuando despierte de este sueño de ocres y vea que todavía la literatura sigue ahí, como un dinosaurio que percibe un cielo roto.

Debo callarme frente a los que escriben haikus en romance. El analfabetismo literario es muy visceral y nunca sabe a qué premio optar al día siguiente, si el Nobel o el Cervantes, el Reina Sofía o el Federico García Lorca.

Las confidencias hay que merecerlas; los que opacan el cristal no son destinatarios del intimismo, como esas presencias que se extraviaron en algún recodo de la amistad y nunca regresaron a casa.

Otros siguen considerando el insulto como una de las bellas artes. Y baten palmas frente al alba rosada de los exabruptos. Tal creencia dice mucho de su estado mental, de su empeño de viajar en barca por el mar de la Mancha y, claro y conciso, del enorme porvenir laboral que tiene la psiquiatría.


(Diario de ausencias)


domingo, 12 de junio de 2022

ENTREVISTA A JOSÉ LUIS MORANTE: PLANOS CORTOS

José Luis Morante
(Palacio Real de Madrid, 2022)
Fotografía
de
María Hernández Costa 

 

AFORISMOS CON SESIÓN CONTINUA


Tasio Luna
 
 
Casi de forma simultánea han visto la luz en 2021 dos entregas aforísticas del poeta, profesor y crítico José Luis Morante. La primera, Migas de voz es una antología editada en México por la Universidad Autónoma nacional; la segunda obra, Planos cortos es un cálido homenaje al cine.
 
La tarea de practicar varios géneros, ¿de qué manera condiciona a sus aforismos?
 
Creo que cuando se entiende la escritura como una casa abierta, cada habitación cumple su doble condición de refugio y hospitalidad; en mis aforismos conviven muchos rincones afines con la poesía o la crítica; todos partes de la misma experiencia biográfica y cultural, de un modo similar de interpretar el entorno y el tiempo histórico.
 
Sus poemarios trasmiten un fuerte eco autobiográfico, ¿sus aforismos también?
 
Ningún género puede velar la pulsión expresiva que dicta sus renglones; la identidad respira también en los aforismos, comparte instantáneas, recuerdos, miedos, incertidumbres; en suma, la conciencia en continuo fluir del sujeto que escribe.
 
¿Era previsible esta aparición estelar del decir breve en las primeras décadas del siglo XXI?
 
Hay una verdad impostada en asociar el aforismo al despertar digital; la verdad es que en todos los periodos de la historia se han cultivado distintas formas del decir breve: sentencias, epigramas, refranes, aforismos; la celeridad de internet ha potenciado la fragmentación y la celeridad de los mensajes, pero el género tienen una intensa tradición en nuestra literatura.
 
Parece  que es ejemplar la capacidad de escucha del aforismo; cualquier tema sirve…
 
Así es, el aforismo, como el poema o la reseña es un hecho del lenguaje que admite cualquier hilo argumental, siempre y cuando se supere esa consideración que asocia el laconismo a la facilidad expresiva y la intuición; debajo de cada texto, por mínimo que sea, está la dura labor del taller literario, su exigencia máxima en cada fragmento.
 
Cómo se gestó esa edición mexicana de Migas de voz.
 
Nació en 2017, cuando recogí una amplia selección de aforismos de los dos libros publicados y del inédito A sorbos, era la mejor manera de construir un mapa personal que subrayara las características reiteradas de mis aforismos. Y el profesor, ensayista y aforista mexicano Hiram Barrios impulsó la edición en una nueva colección esquirlas; la espera de tres años mereció la pena, la edición final es muy hermosa.
 
¿Y Planos cortos?
 
Es un giro fuerte en el trabajo personal, frente a la apertura temática aleatoria de mis anteriores entregas, supone construir un libro en torno al cine como núcleo único. Soy un cinéfilo antiguo y agradecido; en absoluto un experto en ese arte, solo un espectador que siempre halló cobijo en la butaca a oscuras.
 
¿No teme que la salida  de ambos libros a la vez solape reseñas o interfiera la distribución correcta?
 
No lo sé; en principio son ámbitos lectores distintos; Migas de voz está destinado al público universitario mexicano y no se distribuirá en librerías españolas, aunque mandaré ejemplares a crítica y medios de comunicación; y hay que dar la batalla por Planos cortos que debe luchar contra la incertidumbre de la pandemia y la lánguida vida cultural del momento. Son retos que asumo con mucho gusto; siempre confío en la generosidad de los amigos y el incansable apoyo de los lectores.

¿Nos despedimos con una mínima selección de aforismos?
 
 
El sentimiento de desolación, esa llave que solo cierra.
 
Los aforismos tienen el trazo inconformista del grafiti.
 
Es bueno enmarcar la incertidumbre como un quinto punto cardinal.
 
Cada lunes inventa su oratoria
 
Somos la intacta erosión que fuimos, y seremos el polvo que ya somos.
 
Todo espíritu etéreo se vislumbra en su etapa ascendente.
 
Los que no saben ratifican con énfasis constante su ausencia de verdad.
 
Anima y da valor esa sospecha de que todos discuten contra mí.

Tasio Luna



 

miércoles, 18 de mayo de 2022

EL YO, CONMIGO

Añoranza del frío
Fotografía
de
Rosa María Hernández Costa

 

EL YO CONMIGO

 

Hay biografías que tienen la duración de un aforismo y menos contenido.
 
En la madurez se impone el relato evocativo; los sentimientos exigen estructuras elaboradas, escenarios con luz natural y narradores distanciados.
 
Se quedó solo. Ahora recupera fragmentos emotivos en la galería de los desafectos.
 
El pudor convierte  la confidencia en un movimiento de ajedrez.
 
Reglas ortográficas; identidades que son comas, puntos finales y puntos suspensivos.
 
La voluntad del cínico prefiere ideologías de alquiler.
 
Futuro; esa aspirina diluida en el agua fresca del fracaso.
 
Para hablar de mí, empleo un silencio en cursiva.
 
Tengo una sombra metafísica, proclive a la especulación. A cada paso me pregunta si hay alguien delante.
 
Ida y vuelta; itinerarios existenciales que se desintegran en el mismo azar.
 
Andar extraviado tanto tiempo me deja ante tu puerta. Llamo al timbre. Espero.
 
(Rivas, 2021)
 
 

 

viernes, 12 de abril de 2019

HOSTIGAMIENTOS Y HUIDAS

Ayuttaya (Tailandia, 2017)
Fotografía de
Rosa María Hernández Costa

HOSTIGAMIENTOS Y HUIDAS

La tramposa gramática del insulto se justifica a sí misma como fruto de una hilazón invisible de causas y efectos. Y crea un perplejo inventario de rabia, tanto en la universidad, como en el campo de fútbol o en los barrios periféricos más humildes. ya se sabe, el culpable siempre es el otro. Nadie se ve a sí mismo como un sujeto violento e incontrolado, como un imbécil ocupando el primer plano de la ineptitud con una conducta perversa.

Mi fisiología sufre un deterioro expansivo. Me lo advierten a diario mis células auditivas, la necesidad de luz fuerte en las horas nocturnas o los cortes del sueño… Yo continúo con mis hábitos, como si no me diera cuenta. Y casi me engaño.

Ese anhelo tan complejo. Ser coherente con uno mismo y que además lo sepan las ubicuas voces de la contradicción.

¿Por qué lo sencillo es tan complejo?

El cansancio cartesiano se reparte a partes iguales en cada proyecto literario. Conforma un material en depósito que debo gestionar para que nunca se agote. Por eso hay que seguir, con lentitud y paso calmo

(Páginas del diario)






lunes, 1 de abril de 2019

AFORISMOS Y PASOS

Exilios
Angkor Wat (Camboya)
Fotografía de
Rosa María Hernández Costa

AFORISMOS Y PASOS


Los malos caminantes solo vislumbran metas; pero ignoran los puntos de partida.

Nunca piensa; quiere evitar la colisión de ideas.

Todavía acomplejado por ese periodo de su existencia en el que hacía la guerra a lagartijas, renacuajos, hormigas y moscas. Lo denomina "Etapa de conquista".

La mirada abierta es exilio y magia, como el imán que atrae las limaduras.

En la arqueología, intacto, el lustre poético.

¿La lectura? Una capa de humus.

(Inéditos en Camboya)



miércoles, 29 de noviembre de 2017

LA MIRADA CONFORME

Quietud
Fotografía de
Rosa María Hernández Costa


EL CONFORMISTA

El tiempo rellenó su biografía
con parquedad de datos
y un rosario de nombres familiares.
Su vida fue un estático paisaje
mostrándole futuros
de amables horizontes.
Depuró pretensiones
y, fiel a esta visión, mantuvo siempre
una estrechez de miras encomiable
por cuyo territorio
repta obsesiva la monotonía.
Si nada importa el cómo,
escasas huellas deja algún por qué
y el dónde es un espacio reducido,
con paredes alzadas
a la medida de mejores tiempos.

      (De Un país lejano, Barcelona, 1998)