Poesía completa
Víctor BotasEdición y prólogo de José Luis García Martín
La Isla de Siltolá, Sevilla, 2012
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“novísimos”, la obra poética de Víctor Botas (Oviedo, 1945-1994) comienza trayecto a finales de
los años setenta, en el titubeante clima de la transición, y cristaliza con
fuerza en la geografía plural de la década siguiente gracias a su calidad
literaria, al empuje afectivo de Paulina Cervero y al empeño de críticos como
José Luis García Martín, su amigo y primer valedor.
La iniciativa de La Isla de Siltolá asienta
de nuevo en el escaparate un volumen de impecable aspecto formal, con desnuda
cubierta minimalista, y recupera una voz que ya es patrimonio de un amplio
colectivo de compañeros de viaje, en la que han profundizado los ensayos
breves coordinados por José Luna Borge y Leopoldo Sánchez Torre y que se recopiló en antologías
como Historias con historia (Antología poética 1979-1994), firmada por Luis Bagué Quílez.
En la introducción, José Luis García Martín
enumera los múltiples enlaces con el poeta y la obra y los rasgos más señalados
de esta escritura: tradición grecolatina, admiración por Borges, coloquialismo,
humor, crítica social, autobiografía velada que proyecta las vivencias
concretas de una identidad que es al mismo tiempo autor y personaje…Desde su carta inicial, Las cosas que me acechan, hasta la entrega póstuma, Las rosas de Babilonia, Botas mantiene
una nítida personalidad que se enriquece con nuevos matices en el
acontecer temporal en torno a unos cuantos temas: el amor, la historia, la
visión satírica de determinados comportamientos sociales y la ineludible
presencia de la muerte. Estos argumentos concretan la mayor parte de una
producción que alcanza sus momentos cimeros en los libros Historia antigua y Retórica,
y coincido en esta valoración con García Martín quien, en nota a la
edición, clarifica que todos los textos reunidos son aquellos que el autor dio
por válidos, sin añadidos de apuntes malogrados. Para el conocimiento de afinidades,
mimetismos e influencias es muy orientativa la lectura de Segunda mano, un muestrario de traducciones y recreaciones de
textos ajenos. En este rescate de la memoria hallamos una característica común:
el traductor consigue confundir el tiempo de escritura y someterlo a la onda
expansiva del presente. Los nuevos poemas desbordan naturalidad y verismo y
desacralizan magisterios. De de los estantes regresan Catulo, Petronio,
Marcial, Li-Po, y entablan un diálogo cercano con Kavafis o Fernando Pessoa,
como si en cualquier época se reformularan los mismos temas con sensibilidad
pareja.
En el volumen Poesía completa encontramos la aportación definitiva de un poeta
que apareció tarde en el vedado territorio de las antologías de época, pero que
acabó convirtiéndose en una voz referencial, en una forma característica de
entender el poema, mantenida hasta su mutis definitivo.
He reactualizado la entrada por dos sugerencias de excelentes lectores. José Luna Borge me recuerda que el año de nacimiento de Víctor Botas es 1945; Ricardo Virtanen me apunta que la antología de Bagué Quílez abarca hasta 1994. A los dos muchas gracias por su sabiduría y por su amistad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Gracias a ti, José Luis, por sugerirnos libros tan importantes siempre, como este de Botas, que encierra un periplo nada despreciable de 15 años. ¿Qué más necesita una obra literaria para quedar en los anales?
ResponderEliminarQué feo suena lo de convertirse en "una voz referencial". ¿No es más sencillo y claro de convertirse alguien en algo, que sea -y la frase es un tópico- en "una referencia"?
ResponderEliminarQuerido Carlos, a mí me perece que suena bien y que se ajusta a la idea que expone. Una referencia es más impreciso y no veo que hablar de la actualidad de un trayecto sea un tópico. Así que mantengo la reseña tal cual y agradezco muchísimo la sugerencia. Gracias también por la lectura.
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