Taller de autor
Me aplico en construir
lentamente una historia
que se pueda contar,
sensata, verosímil,
que no manche ni ofenda,
que dé seguridad
y pulso firme.
Un poema
sin brújula ni mapa;
errático y feliz.
No quiero saber nada
del futuro.
(Inédito)
No hay otro tiempo que el presente. Aplicarnos en él, acaso sea la vida. Magnífico poema.
ResponderEliminarUn abrazo.
Querido Antonio, estamos viviendo continuamente en el gris del pesimismo y la desesperanza, como si esas palabras sucias "prima de riesgo, bolsa, crisis...- fueran una cuchilla amenazante. El poema es una forma de decir que nos dejen en paz; que estamos hartos de su falsedad y sus mentiras, de su pesimismo y de su voz catastrofista. Gracias por el afecto y seguimos cerca.
EliminarSí, amigo, sí: el futuro ya no es lo que era. Estupendo poema.
ResponderEliminarPues vamos a convertirlo en un personaje inadvertido y secundario. Nosotros, los de entonces, sí somos los mismos. Nos vemos el miércoles en la tertulia; hay muchísimas cosas pendientes, así que allí estaremos. Un abrazo.
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