EL DOBLE
Hasta aquí llegó el ruido, la imprevista transformación del humano
Gregorio Samsa, un monstruo pacífico, rutinario, ensimismado en sus ocupaciones,
ajeno y sin peligro para nuestras galerías. La mutación nos llenó de
perplejidad y durante noches buscamos las causas de aquel cambio. Todos decían que aquel ser era
idéntico a mí.
Tras el
letargo estacional, hoy me desperté sobresaltado, ahuyentando la niebla de los
sueños. Un extraño temblor me llevó a contemplarme en el agua dormida. Ahora el
monstruo soy yo. En el fondo de mis ojos percibo la imagen de Gregorio
Samsa.
Tenemos una obsesión por los dobles. Otro punto de atraque común... Me ha encantado.
ResponderEliminarQuerido amigo, mi experiencia en el microrrelato es tan pequeña que tus palabras me llenan de alegría. Siempre que escribo algo estoy lleno de dudas. Esta vez también. Nos vemos pronto. Cuando tú quieras. Será un placer compartir unas horas de grata conversación.
EliminarMuchas gracias, de nuevo.
Si, hoy un ser pacífico,rutinario,trabajador y sin peligro alguno, se nos asemeja a un monstruo extraño, ¡que cosas!. Muy parecido a mí.
ResponderEliminarInteresante microrelato.
Sabes, Jesús, que la normalidad es siempre cuestionable; que sólo lo que conlleva estridencia es lo que se convierte en noticia.
EliminarUn abrazo fuerte y mi gratitud continua por tu cercanía. Este lunes te remito la revista.
Abrazos.
Como decía Sastre: dejemos las cosas en su sitio, "no como estaban". Buen relato, José Luis. Un beso fuerte.
EliminarHola, Herme, llega septiembre y con él el cauce lleno de las obligaciones. También la posibilidad del reencuentro y los nuevos proyectos que poco a poco, palabra sobre palabra, van tomando forma.
EliminarUn beso muy fuerte y esta vez estaré más pendiente de tu perfil digital. Palabra.