Ella.
Apacible y real,
o cada noche
una obsesión intrusa,
un trapecista
encaramado al sueño más lejano.
Cierzo sobre las horas,
frágil tacto de oro
que acaricia los cuerpos estivales,
posesión ilusoria,
laberinto;
sorpresa entre los restos
del último naufragio,
o compleja ecuación
que resuelve una suma
reiterativa,
extraña, irresoluble,
en la que el todo siempre
es mayor que la suma de las partes.
(De Causas y efectos, Sevilla, 1997
Premio de Poesía Luis Cernuda)
Como me ha gustado este poema tuyo y que bien resuelves la
ResponderEliminarsuma. me encanta.
Un fuerte abrazo.
Querido Paco, no sé si recibiste mi mensaje; tengo un puñado de aforismos que me gustaría dedicarte en una entrada del blog. ¿Te parece bien?
EliminarPor lo demás, qué decir ante un lector que siente cada palabra como una palmada de amistad. Pues sólo una cosa: gracias.
Hola, no he recibido ningún mensaje, desconozco la vía que has usado
Eliminarpara hacérmelo llegar. Que quieras dedicarme una entrada ya es para
mí un regalo. por cierto, no sé los motivos, aunque en mis poemas
a veces me gusta encerrar algunas lecciones de moral. no sé si este
es el motivo por el cual quieres dedicarme esta entrada moralista.
Un fuerte abrazo, y maestro usted tiene mi permiso para dedicarme
lo que le plazca.
Ningún motivo, sólo mi gratitud por tu continuo aliento; si prefieres un poema en vez de un aforismo está hecho. Vaya, que te lo mereces, sin más.
ResponderEliminarAbrazos. Mi mensaje te lo mandé por gmail.com
Pues encantado, si me lo permites dicen que
Eliminarel primer pensamiento es el que vale, y los
aforismos me encantan.
por cierto, quedas invitado, cuando lo desees
a visitar mi blog, http://nocheperegrina.blogspot.com.es/
comprobarás que en algunos de mis poemas
me gusta colar algunas sentencias moralistas
al igual que en mis relatos cortos siempre
les doy alguna enseñanza moral o sentimental.
que conste que no estás obligado a visitarme
más allá de mis pretensiones.
Un fuerte abrazo y voy a revisar mi gmail.
Muchas gracias. Preciosos poema. Es un honor que la imagen lo ilustre.
ResponderEliminarLa foto fue tomada en casa del profesor y ensayista Muñoz Millanes que vive en el barrio donde vivió juan Ramón Jiménez y en donde estuve García Lorca, muy cerca de la universidad de Columbia. A través de la ventana casi se ve el edificio de Moneo que tanto le gusta al poeta José luis García Martín.
Querido Hilario, gracias por los datos tan precisos. La imagen está llena de sugerencias y creo que participa de la filosofía del texto para crear un entorno habitable; en él, la identidad se fortalece en contacto con lo cotidiano.
EliminarRecuerdo el edificio de Moneo. la verdad es que percepción del trabajo del arquitecto es contradictoria; en El Mercado Grande de Ávila su edificio es un desastre en medio del entorno medieval. Pero lo mismo pasa con la literatura; se acierta algunas veces y otras es mejor empezar de nuevo.
Un abrazo, Hilario.
Precioso poema
ResponderEliminarGracias, Marta, es siempre un placer sentir tu cercanía. Todos somos fragmentos dispersos que se acumulan poco a poco y que nunca acaban de encajar de manera perfecta.
EliminarEl poema trata de esos desajustes vitales que son la forma más eficaz de demostrarnos que seguimos vivos, entre el sueño y la realidad, sin saber nunca qué plano ocupamos.
Un abrazo fuerte, con música italiana en la pletina.
Gran poema, José Luis.
ResponderEliminar"El todo siempre es mayor que la suma de las partes"...cuánta razón. Creas con tus palabras, mezclando tantos signos contradictorios y a la vez concordes, la sensación perfecta para este poema, las vibraciones precisas.
Irresoluble. Me quedo con esa palabra.
Un abrazo enorme.
Querida Amanda, eres tan amable con mis cosas que hay que sumar el afecto a tus juicios. me alegra mucho que mi literatura te resulte cómplice.
ResponderEliminarFue un placer recibir tus noticias y tenemos pendiente una larga charla. llama cuando quieras.
Abrazos.
... por esto nunca creí en los críticos literarios...
ResponderEliminarNi creeré jamás.
José Luis, saludos.
Claro, claro: "dos y dos son nueve".
EliminarHe creido corresponder con tus necesidades como persona, pero sabes que no soy una mujer que le hace la pelota a nadie para conseguir nada.
ResponderEliminarCreo que cuando una persona escribe un libro, quien decide si gusta es el público que lo lee. Él es el mejor regalo que puede tener un escritor.
Me hubiese gustado desde hace tiempo, y lo sabes, haber tenido también esa larga charla contigo y haber podido llamar cuando hubiese querido. Pero la amistad no requiere de halagos, al menos por mi parte.
Sí, dos y dos son nueve, cualquier criatura que no sepa sumar, se lo creería.
José Luis, mucha suerte con todo y hasta siempre. No necesito a nadie para que me ayude en ningún aspecto.
Un saludo cordial. Y mucha suerte. La literatura es siempre un camino en solitario.
ResponderEliminarPor supuesto que es solitario, no cabe duda que todo lo demás es comercial, y en muchos casos, el interés es lo que predomina.
ResponderEliminarUn buen escritor o escritora, huye de tanto escenario.