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| Fotografía de Andrés Romarís (2015) |
TIEMPO NUEVO
La vida es un cuento contado
por un idiota, lleno de ruido y
furia
W. Shakespeare
Y que no sea
un mar en desvarío
de ruido y furia.
Participo de tu deseo, José Luis. Ojalá que sea un mar bueno, firme y transparente, donde podamos mecernos mientras disfrutamos de la calma de la amistad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Detecto alrededor un pesimismo creciente, una molesta sensación de derrumbe que afecta al modelo social, a las ideologías, a lo diario... Y soy de los que no comparten ese nihilismo terminal. Mañana empieza hoy. Y quiero comenzar con un gran abrazo: felices fiestas, querido Antonio.
EliminarHay que mirar la vida con alegría y esperanza; pues es el mayor tesoro que tenemos.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con usted.
Felices Fiestas.
Un abrazo, Marián, la amanecida es tarea de todos; es el caminar cerquita, hombro con hombro, sabiendo que las aceras siempre deben estar llenas de esperanza. Felices fiestas y muchas gracias por cruzar estos puentes de papel.
EliminarMuy bonito!
ResponderEliminarLa imagen es del poeta y ensayista Andrés Romarís, que hace de cada fotografía un paisaje para los sentidos; y las palabras que sugieren el haiku son de W. Shakespeare. Así que esta entrada es un trabajo en equipo al que lectores como tú ponen afecto. Un gran abrazo.
EliminarQuerido José Luis, creo que fue Spinoza quien dijo aquello de «Puedes tener luz sin sombra, pero no puedes tener sombra sin luz». El pesimismo es, justamente, echar en falta la luz, eso que tú nos has contado estupendamente con el contraste de dos poemas. Un abrazo fuerte.
ResponderEliminarGracias, amigo; la existencia no es un uniforme, ni nuestra forma de percibir tiende a la monotonía, así que la expresión de pensamiento y emoción también aspira a lo plural. Muy agradecido por tu anotación que una vez más añade al haiku un punto de diálogo. Feliz jornada.
EliminarCon frecuencia lo es, no lo olvidemos, aunque ahora se muestre a nuestro lado en calma chicha. Un abrazo.
ResponderEliminarPero son más ruidos que nueces, Fakel; el mar es un espacio hospitalario, y la realidad también; si no existiesen habría que inventarlos. Un gran abrazo y mis mejores deseos navideños.
EliminarMuy de acuerdo con tu mensaje José Luis. Felices fiestas navideñas amigo, que las disfrutes en Paz y Poesía con tu familia. Un abrazo
ResponderEliminarLo mismo te deseo, poeta; tiempos de niebla que necesitan un abril despejado, una primavera también en invierno. Mis mejores sueños para el nuevo año.
EliminarA veces ese mar embravecido, con ruido y furia es puro símbolo de vida , de energía, de fuerza y empeño de enfrentarse a la costa, sus acantilados, sus rocas, sus dificultades. Claro, te hablo de mi Cantábrico. Tu mar tiene mucho ahora de Mediterráneo.
ResponderEliminarEs el mar del norte el que reposa en la fotografía de Andrés Romarís. Y es un buen símbolo de la inquietud social que prevalece en el ahora. Un gran abrazo y ojalá W. Shakespeare no fuera premonitorio.
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