jueves, 25 de junio de 2020

CON LA VOZ APAGADA

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Blog del Fotógrafo


CON  LA VOZ APAGADA


Escribía aforismos; le gustaba patinar sobre zancos.

Voluntad continua para especializarse en el autorretrato. Pero no encontraba modelo.

En la consulta, frente al doctor, bajo los ojos. Confieso mi adicción. Una y otra vez recorro una llanura escrita.

Escribir es vencer el miedo. La literatura es un acantilado que reclama el salto.

Mientras estoy en ella, la realidad es un espacio en blanco.

Para explicarse, mi sombra usa el silencio. Con la voz apagada, se entiende mejor.

La felicidad atestigua demoliciones. Lo que pudo haber sido.

Enfermé de ausencia. Nunca estoy. Cuando vuelto aparezco amorfo e impreciso, como si me hubiese perdido en el camino.

Las máscaras engañan cuando mienten, y cuando dicen la verdad.

Sobre el dintel de cada aforismo alerta un dictum preventivo: aquí hablar mucho cuesta caro.

(Aforismos a solas)

8 comentarios:

  1. Ay, amigo! Entre la máscara y las demoliciones. Nos va a costar caro, pero hay que seguir. La cercanía es refuerzo. Abrazos y buen día amigo 🤗

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    1. Es un placer este regreso, Luis Ramos, ando feliz por la nueva antología; pero también por la respuesta afectiva y amistosa de los amigos que enseñan a sentir cerca el calor necesario; lo demás sobra. Que disfrutes del tiempo estival; ya huele a playa.

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  2. Muy bueno. Claro. En el aforismo las palabras cuestan caras y hay que economizar. así lo veo yo

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    1. Así es, José; la economía es esencial; cada palabra cuenta, cada hojarasca sobra; y te agradezco muchísimo ese estar cerca con ánimo y generosidad lectora; suerte grande en el nuevo tiempo. Volvemos al sol.

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  3. Respuestas
    1. Un fuerte abrazo, Gabriela Rosas, y la esperanza de que te cuides mucho en este largo tiempo de soledad y encierro; aquí ya huele a mar, queda muy poco para buscar otros paisajes más abiertos.

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    2. Me alegra muchísimo por ustedes y tu tierra. Acá queda trecho de espera y encierro. Un abrazo

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    3. Cuánto me inquieta oír eso, Gabriela, porque los efectos son devastadores sobre todo en los mayores, así que máxima prevención y la esperanza de que te cuides muchísimo; la prudencia es la mejor medicina junto a las normas sanitarias. feliz día.

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