lunes, 16 de marzo de 2015

JOSÉ MARÍA ÁLVAREZ. CIUDADES

El oro de los tigres 
José María Álvarez. Antología poética
Edición de Noelia Illán
Editorial Balduque, Cartagena, 2015

CIUDADES

   Aunque adscrito a la etiqueta “novísimos” y a la generación del lenguaje, el trayecto poético de José María Álvarez (Cartagena, 1942) contiene un personalísimo acento, un carácter singular que alcanza su máximo exponente en la entrega Museo de cera. Ese libro central se estructura como una obra en marcha que, tras su amanecida en 1974, se va completando con  sucesivas incorporaciones poemáticas hasta alcanzar arquitectura definitiva en 2002.
  Incansable activista cultural, narrador, ensayista y viajero que mantiene el tipo en cualquier mapa geográfico, José María Álvarez ha impulsado un sólido y vasto trabajo literario, por lo que resulta muy difícil realizar una acotación significativa de cualquiera de sus facetas creadoras. La joven poeta Noelia Illán, profesora de latín y griego, lleva muchos años estudiando el discurrir creador de José María Ávarez; ahora edita en la emergente Balduque -con deliciosa presentación y una atinada cubierta de Ángel Mateo Charris- una selección poética. El propiol escritor incorpora al libro una breve entrada de gratitud en la que diserta sobre el azar y el orden, dos premisas unidas a la palabra de Jorge Luis Borges, a quien también evoca el título de esta antología que la editora ha subtitulado Los exiliados del mundo.
  La lírica de José María Álvarez se define desde un culturalismo vivencial en el que el protagonista poemático toma la palabra para exponer una visión del mundo. El yo verbal se aleja del aspecto rampante de lo cotidiano para captar los matices más relevantes del devenir existencial. A esa percepción aristocrática de la vida de una biografía imaginaria al paso contribuye el aporte culturalista y una existencia en tránsito, en la que el viaje es conocimiento y expansión de las tenues fronteras del personaje central.
   Esta edición de Noelia Illán selecciona textos de las sucesivas entregas de José María Álvarez en los que el desplazamiento se define como un motivo central. Pero la semántica  tiene amplias bifurcaciones: el viaje es un paseo por el pensamiento en el que, con apacible sosiego, el yo recorre los secretos de la meditación, cuyos pliegues cobijan las preguntas de siempre; también la travesía es una línea en cuyo espacio se dan cita dos o tres cuestiones nucleares: el sentido existencial y la temporalidad; Otro detonante es el viaje como itinerario cultural capaz de cobijarse en las voces de clásicos que han fortalecido la educación sentimental del escritor hecha “carne de cada página” ; y naturalmente el viaje como trazado geográfico, como destino de llegada para que los sentidos perciban las formas de luz que da a cada lugar una belleza indeclinable. 
  Unos versos de José María Álvarez, integrados en el poema “Soleils couchants” vislumbran lo que aguarda al nomadismo visual del viajero: “hallar en algún sitio una especial /  mixtura de exotismo, belleza y abandono donde / perderme “. Quien sabe que la actitud diaria del sujeto ante lo cotidiano es también una página decisiva, una expresión de belleza, se esmera en captar la perfección de cada instante, esa plenitud que estremece, siembra gratitud y convierte el epitelio de lo real en un delicado sueño.
   El oro de los tigres compila un caminar de largo recorrido, las variadas singladuras de José María Álvarez. Los poemas seleccionados por Noelia Illán  proponen un diálogo vivo entre el ser cosmopolita y las distintas ciudades, interlocutores que airean sus esquinas y despiertan el pasado para dejar en la retina del viajero esa felicidad del itinerario cumplido. 


8 comentarios:

  1. Sigo con interés, puntualidad, sorpresa y gozo, tus reseñas, poemas y aforismos, en esta luz de marzo que busca entre caídas la primavera.
    Feliz semana José Luis.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola poeta, si puedes, no te pierdas este libro porque desde la nota inicial hasta el último poema airea un recorrido lleno de relevantes miradores. Yo también estoy siempre cerquita de tu literatura. Un fuerte abrazo y gracias por el afecto.

      Eliminar
  2. En la generación del 70 una etiqueta copó el ambiente literario de la década: los novísimos. Eran poetas con una gran preocupación formal y con un amplio legado cultural. José María Álvarez pertenece a ese ideario estético y sigue siendo un poeta imprescindible, como demuestra la muestra seleccionada por Noelia Illán. Además la edición es muy bella. Así que un regalo perfecto para la biblioteca personal. Un fuerte abrazo por tus palabras.

    ResponderEliminar
  3. Parece muy interesante José Luis, intentaré no perdérmelo. Gracias por compartir tanta información poética. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es un libro importante, Carmela, porque el itinerario creador de José María Álvarez prosigue con coordenadas muy reconocibles. En pocos escritores cobran tanta importancia los efectos del viaje, esa plenitud que concede la existencia como tránsito. Un abrazo y encantado con tu cercanía.

      Eliminar
  4. ¡Cuánto por conocer y aprender! Leo, principalmente poesía, y, no obstante, desconozco muchos poetas. Con tus reseñas, voy ampliando conocimientos y deseos de adentrarme en los poemas del autor que nos presentas.
    Gracias, José Luis. Muy interesante todo lo que escribes.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Fanny, uno de los privilegios de la lectura es la construcción de un poblado mapa cultural. Comencé a leer en bachillerato y sigo igual, con más miopía, pero con el mismo afecto a los libros... No quiero agobiarte con mis reseñas. Hay mucho que leer y por eso procuro seleccionar los libros comentados. Además en este se da la circunstancia de que comienza camino la editorial Balduque, y no se puede negar que ha elegido una excelente carta de presentación. Abrazos entrañables.

      Eliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.