DOBLE CARA
Dedicó las tareas del existir a la
creación de un espejo de doble cara. Quería fabricar una superficie dual para que reflejara al mismo tiempo el rostro de quien se mira y la visión completa de la espalda, ese
conjunto de trazos desconocidos que están ahí y conforman una suposición.
Creía que la imagen posada en el azogue es y no es, porque yuxtapone lo evidente y lo probable, la claridad y la tiniebla, lo expuesto
y lo invisible. Cada espejo es una luz escoltada por la sombra.
(De Cuentos diminutos)
Me encanta José Luis!
ResponderEliminarUn abrazo fuerte (de los que abarcan pecho y espalda) :)
Gracias por tu cercanía, querida sandra, y ahí seguimos preguntando al espejo dónde esta lo evidente y dónde lo imaginario; haciendo de la claridad una doble cara.
Eliminar