lunes, 12 de enero de 2015

JOSÉ MANUEL BENÍTEZ ARIZA. PANORAMA Y PERFIL

Panorama y perfil
José Manuel Benítez Ariza
XXVIII Premio Unicaja de Poesía
Colección DKV, Jerez, 2014

PANORAMA Y PERFIL
 
    Editado en 2007 por Renacimiento, el volumen Casa en construcción aglutinaba un representativo perfil poético de José Manuel Benítez Ariza (Cádiz, 1963), autor plural, poco proclive al estar ocioso, que recorre ficción narrativa, traducción, relato, autobiografía y ensayo crítico. Este camino múltiple suma un paso nuevo en 2010, cuando amanece el libro de poemas Diario de Benaocaz, y encuentra continuidad en su obra Panorama y perfil, una hermosa entrega de Libros Canto y Cuento.
  La tarea poética es una caligrafía de interrogantes, un insistir de la pupila imprecisa en el lindero de un horizonte abierto; rescato aquel temprano viaje a la razón de ser de su escritura que el gaditano, todavía veinteañero, escribió en La poesía más joven, una inmersión en la década del ochenta, coordinada por Francisco Bejarano: “Mis poemas cuentan cosas. Que este carácter sea impropio o no de la poesía es algo que no me importa demasiado. Para evitar confusiones, conviene recordar que el hábito humano de contar tiene poco que ver con lo que la literatura define como narrativa”. De la apuesta por el poema como un mapa de ruta argumental que avanza, con sosiego y lucidez, hasta la línea de llegada nace una lírica narrativa y conversacional, abierta a la contingencia del presente y protagonizada por un conversador reconocible, con afinidades con el yo biográfico. Este ideal expresivo se ha mantenido con natural coherencia, de tal modo que si rescatamos versos de Las amigas o de Malos pensamientos no hallaremos disonancias graves con las composiciones de Diario de Benaocaz o de Panorama y penumbra, logros maduros que encajan como piezas centrales en una evolución pautada y unitaria.
   Inicia Panorama y perfil la serie “Cuaderno de campo”, una meditada contemplación del sitio donde la mirada vaga por las aceras del ensimismamiento. En él encuentran asiento el intimismo y el apunte biográfico;  trascienden la anécdota y dejan su reflexión sobre la lógica de lo transitorio, siempre cargada de sugerencias. El pensamiento concede a las cosas una nueva epidermis, otro plano de realidad que busca permanencia. La escritura se convierte en respuesta: “Que en la noche mi cuerpo se compacte / en una masa opaca de rumores. / Apenas sensitivo, sí,  / pero con todas y cada una /  de mis terminaciones nerviosas / dispuestas a sentir / la ilimitada variedad del mundo. / Y sin moverme de mi centro”.
    En el sitio callado del espejo, el poeta encuentra los rasgos de su autobiografía; una descripción nada complaciente, que huye del ruido de la épica. La voz suena con el punto de ironía de quien busca entenderse en su exacta medida, entre afectos que manan de un vitalismo nostálgico –qué emotivo el poema “padre”- y soportando el ruido del tiempo, desde la infancia hacia el gris de la derrota. 
   Sirve de coda una poética hecha en la biblioteca. Cada voz se afianza bajo el árbol de la tradición, aglutinando trazos divergentes que se amalgaman en un patrimonio común. Están Celaya y Juan Ramón Jiménez, MacLeish  y Huidobro, y está el secreto de quien sabe que la buena poesía siempre guarda su misterio intacto. Esta salida de José Manuel Benítez Ariza tiene una nervadura metafísica de aire clásico. En ella se reencuentra con sus incertidumbres, con la esencia de un tiempo estricto y paradójico, con olor a nostalgia.

2 comentarios:

  1. José Luis, sé que seguramente no podré leer todo lo que reseñas y nos propones, pero leerte a ti en tus post sobre estas lecturas para mí ya es un placer en sí mismo. Gracias por compartirlo!!
    Me quedo sobre todo con esto que me gustó mucho, y creo que invita a la reflexión:

    “Mis poemas cuentan cosas. Que este carácter sea impropio o no de la poesía es algo que no me importa demasiado. Para evitar confusiones, conviene recordar que el hábito humano de contar tiene poco que ver con lo que la literatura define como narrativa”.

    Saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Coincido contigo plenamente. Esa poética es casi un reflejo exacto de mi forma de entender la escritura. Y no debes agobiarte en absoluto con las lecturas al paso. Poco a poco, La biblioteca sabe esperar el momento justo. Abrazos.

      Eliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.