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DISTANCIA
Un imposible folio descubre el automóvil
de mis días, recorriendo el asfalto
de un tedioso carril
donde nunca se sabe el final de trayecto.
Dócilmente una nube me persigue,
el páramo entrevisto aparece y se nubla
sin mucha convicción.
En el salpicadero una luz discontinua
sobresalta la aguja del cansancio.
Sobre un otero romo un gran cartel anuncia:
"A ti pocos kilómetros",
y una curva resguarda un frondoso jardín
donde tus ojos velan como lunas
de algún lejano cielo inaccesible.
(Población activa, Gijón, 1994)
Siempre habrá un jardín a nuestro lado donde beber esa agua que nos fortalezca en el día a día. Recoge el miércoles con ánimo. Hermoso poema. Un abrazo José Luis.
ResponderEliminarSiempre estará ese jardín, Jesús, el lugar de regreso, el sitio donde nos esperan los afectos para que el cansancio se atenúe y sigamos en pie. Un fuerte abrazo.
Eliminar"A ti pocos kilómetros",
ResponderEliminary una curva resguarda un frondoso jardín
donde tus ojos velan como lunas
de algún lejano cielo inaccesible.
Menudo cierre de poema José Luis! Me encanta! Ayysss....
Me gusta ir leyendo tus poemas.
Feliz miércoles!
Sandra.
Querida amiga, debo confesarte que sin ti este blog sería muy poca cosa, un simple inventario de textos callados. Así que una vez más gracias de corazón por el ánimo firme de cada día. Abrazos.
EliminarMuchas gracias por ese comentario tan amable José Luis, pero no, sin mí, tu blog seguiría siendo un lugar de referencia donde acercarse a leer buena Poesía y buenos textos. La suerte es mía de haberlo encontrado como un oasis en este desierto del ciberespacio... de todos modos graciassss y un abrazo de corazón amigo José Luis.
EliminarEl paraíso en la curva, cerca del asfalto, de las luces en fuga y de los neones.
ResponderEliminarMe encanta, querido José Luis, ese poema tan de lo cotidiano y de lo abstracto al mismo tiempo.
Hoy ya rozando la helada en estos lares.
Un abrazo, poeta.
Creo que conoces como yo esa sensación de viaje diario, ese recorrido que lleva hacia algún sitio lejano que solo conoce la incertidumbre. El poema pertenece a un libro editado en 1994 en la maravillosa colección Deva, Allí estaban poetas que eran amigos y maestros y debo la felicidad de estar en ese catálogo a José Bolado, director de la colección y excelente poeta. Un fuerte abrazo, con tiempo de otoño.
Eliminar¡Leche! qué bien escribes....
ResponderEliminarMuchas gracias, Tracy, en ello estamos, en hacer de la literatura un diálogo cordial con los lectores. Gracias de corazón por tu benevolencia que me anima a seguir con ánimos, a pesar de los años, a pesar del cansancio... Besos mil, como lluvia.
EliminarEstimado amigo. me parece muy interesante la escritura de este tipo de poemas "del día a día" en los que alumbra esa magia del momento interiorizada en las palabras justas. Me apunto tu blog y lo difundiré. Un cordial saludo, Javier Delgado
ResponderEliminarGracias de veras, Javier, soy de los que creen que la poesía es un diálogo a dos voces entre autor y lector, así que procuro huir de la gratuidad hermética. Buen día y bienvenido a estos puentes.
EliminarPor si acaso me espero a que el semáforo se ponga en verde, ese cansancio que mencionas me parece peligroso.
ResponderEliminarHaces bien, Chisme, respetar las normas de tráfico es una buena costumbre a cualquier edad...Me alegra encontrar tu voz en el blog; tienes una agenda repleta de urgencias... Abrazos.
EliminarQue un poema escrito hace años siga teniendo la misma vigencia de entonces, tiene un claro y principal significado, ser el resultado de un buen trabajo. Me ha encantado el poema José Luis. Gracias siempre por compartir.
ResponderEliminarAbrazos.
Eres muy amable, Carmela, porque siempre haces de la lectura un camino de encuentro. En efecto, el tiempo ayuda a dar luz a versos de otros días en los que nos reconocemos. Aquel libro me dejó en las manos muchos momentos gratos. Abrazos, poeta.
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