![]() |
En el país del haiku Fotografía de Adela Sánchez Santana |
un clamor de tormenta.
Alerta roja.
![]() |
Venus de Milo Museo del Louvre, París |
CURIOSIDAD
La sobria vanidad de la escultura alzó los ojos y
fijó su mirada en mí con desconfianza, como si me viese por primera vez.
Después fue repasando el contorno lineal de mi silueta en busca de algún
apéndice roto, de esos indicios que nos guarda la humillación del tiempo.
(Microrrelatos de verano)
Mirador (Días en Florida) |
AGUA POTABLE
Cuántos manantiales sin agua potable.
Esas páginas impolutas y frías, sin glóbulos rojos.
El aspirante a personaje concede al ombligo un interés escénico.
Discreto, en la mirilla de la mañana pide asilo el esqueleto de un dinosaurio.
Mientras se aquieta la bruma, el sol es una lámpara minúscula, de segunda mano.
Los insectos sobre la tierra fría del sendero. Soledad camuflada de vida.
La trastienda mental de quien sustituye amigos por animales domésticos.
Como gesto de autoprotección, espío los versos sueltos de mi vecindario.
La rutina carboniza el asombro.
![]() |
Panorámica visual (Hiroshima, Japón, mayo de 2025) Fotografía de Adela Sánchez Santana |
![]() |
Fuentévar Francisco Caro Mahalta Ediciones Colección Adivinos Ciudad Real, 2025 |
PAISAJES CON FIGURAS
![]() |
Plaza de la memoria Fotografía de Adela Sánchez Santana |
EL TIEMPO SIN VOZ
PARADOJAS
Los códigos cifrados.
El pájaro y la jaula.
La lluvia en los poemas.
El mar de tierra adentro.
La ceguera y los libros,
aquella afinidad entre mi padre y Borges.
La idea que cobija el borrador.
Esa ilusión etérea de las cosas reales.
Las rosas sin olor, las flores secas.
El tiempo y la quietud de cada instante.
La luz y el corazón de las tinieblas.
Los días que amanecen y no estoy.
He tenido un sueño muy extraño. Todo alrededor era un extenso espacio de silencio, un tiempo sin voz. Alzo los ojos y allí están mis carencias dinámicas y orondas, repletas de vida, con el mismo entusiasmo de siempre. Sí, soy yo, no hay duda.
Cuánto “no sé” en las respuestas de algunas amistades en retirada.
Me reconoció por la voz y me abrazó
con fuerza, pero había perdido su entusiasmo vital. No sé por qué me pidió
perdón mientras me comentaba que durante años había vivido en él un estúpido de
oficio, con una intensa vida laboral. Me dejó en las manos una inquietud
desconcertante que tardaré tiempo en enfriar.
Los impostores de identidades digitales se detectan de inmediato, como los falsos lectores que han leído todas las novelas de Borges.
No votar la candidatura a la Real Academia de Luis Alberto de Cuenca es un dislate más de la vida literaria , un error que advierte de que para obtener el dorado vellocino hay que estar y no ser.
Se preocupa tan poco de mí que siempre contesta con lugares comunes. Actos reflejos que significan lo mismo si viajo a Madrid o a Tokio. Pero su actitud no me pasa inadvertida; para mí hace muchos meses que es invisible y solo escribe libros sin palabras.
Diario de viaje
ESTRELLAS SIN HILO
![]() |
Conversación Fotografía de Javier Cabañero Valencia |
1
Pierdo palabras; pronto seré un diccionario deshabitado.
La edad recicla la ternura en desuso.
3
Existen muchas formas de soledad. En mí viven las más frondosas.
4
Tras el despertar, qué eficaz la poda de quien
contradice siempre.
5
La caligrafía en cursiva de la aurora imita la espontaneidad del niño que amplifica sonidos y oye la voz del mar en el caño oxidado de la fuente.
6
En el bosque de lo cotidiano, en cualquier rincón, las ramas dactilares del absurdo.
7
Habla poco de euforias infantiles. Fue un adulto inmaduro desde niño.
8
Hay amanecidas que confían en la pericia de la imaginación para sobrevivir.
(Aforismos del bosque deshabitado)
![]() |
Laberintos (Tokio, 2025) Fotografía de Adela Sánchez Santana |
PRIMERA CLARIDAD
1
Vivir la claridad del despojamiento, su estar limpio, su ascesis hasta la otra orilla. Abro las manos. De la quimera existencial me llevo casi nada.
2
Aunque esté lejos, qué trasluz cercano empareja al asombro.
3
La germinación de la belleza requiere constancia; instantes con levedad de nube.
4
6
Tengo una brújula para extraviarme en mí.
7
Antes, la desnudez invitaba al deseo. Ahora apresura la búsqueda urgente de una bata de felpa para evitar el resfriado.
8
Tras la vigilia guardo las cenizas del sueño.
José Luis Morante
![]() |
Templo Todaiji (Nara, mayo de 2025) Fotografía de Adela Sánchez Santana |
EXIGENCIAS LITERARIAS
El yo escritor es el mismo que el yo viajero. Los dos viajan con la espalda ocupada por la mochila de las exigencias. No basta la buena intención. Para
que el itinerario personal cruce
el umbral de lo permanente y busque pronto la silueta de fondo del lector debe
cumplir de forma imprescindible algunas exigencias. Cuánto emociona escuchar la voz dubitativa en el taller. La literatura es un encuentro pactado entre dos
comensales: el autor y las palabras. Son dos caminos que se juntan en un punto
de cruce, ajenos al invierno, para firmar acuerdos y pactos comunes. Igual que cada gota, los dos preguntan donde deben guardar su transparencia. Como pagodas con elegantes techos inclinados cada género asciende para depositar en el aire su techado y su altar: el ensayo precisa el sentido cartesiano, a
salvo de cualquier disgregación; el aforismo la persuasión pedagógica, el epitelio lírico y la
prolongación del pensamiento; el relato la complicidad y la pequeña magia del
final; la novela, el paso libre de los argumentos y la inteligencia ordenadora en el rumbo de los
personajes; y la poesía, el misterio vespertino de la insinuación, el no sé qué
que queda balbuciendo. El escritor sigue buscando en cada viaje la intuición creadora, la riqueza emocional
y la mano azul de un camino sin nadie, laborioso, que consume recorrido en un instante.
José Luis Morante
![]() |
Constantinos Cavafis (Alejandría, Egipto, 1863-1933) |
MURALLAS Y ERIZOS
Con C. Cavafis y Joan Margarit
En estos días de soledad forzada, retorno con frecuencia a la poesía de C. Cavafis. Leo en voz alta composiciones que sobrepasan su condición de textos literarios para convertirse en principios vivenciales, listos para aplicarse a la travesía del mañana que empieza. Así me sucede con “Murallas”, un poema breve breve que suelo emparentar con otro imprescindible en mis hábitos lectores, “El erizo”, un acierto de Joan Margarit. En los dos escritos se habla de un yo encerrado fuera del mundo, seguro, inaccesible, protegido en Cavafis por sólidas murallas y en Joan Margarit por la punzante piel de los erizos. Ambos poemas dan voz a un yo solitario, a resguardo, que con horror descubre que el mundo está fuera, y allí empieza la vida.
![]() |
Cortados de Wadi Rum (Desierto de Jordania, 2024 |
CAMINOS
A resguardo de la erosión rocosa, desgajada del tiempo, como si buscara sitio en un útero oculto bajo el desierto, una ciudad con habitantes mudos vive la calma del silencio continuo. Solo los que se pierden, malvestidos de sed y de cansancio, ocupan la extrañeza de su arquitectura. Ajenos al desvarío de ser ellos, sus pasos unen la estática distancia de otros itinerarios. Todos se borran al atardecer, desintegrados en el mismo azar.
(De Cuentos diminutos)
![]() |
Vértigo (Tower Tokyo, Tokio, mayo de 2025) Fotografía de Adela Sánchez Santana |
AFORISMOS DE JOSÉ
LUIS MORANTE
Minucia interna; en mi interior no encuentro nadie en quien confiar.
Nadie es más que una sospecha de ser de otra manera.
Si miras con atención el lugar que ocupas, donde estás no hay nadie.
En el apagado discurrir del tiempo, adanes primigenios que
aguardan todavía una manzana.
En la madeja de su ingratitud se apelmazan los hilos sueltos.
Los vertederos mentales necesitan poesía bucólica, la espontánea colaboración de una coral
ecológica: piedras, juncos, pájaros, nubes e ingenuidad…
Carne tranquila. Senectud.
El paternalismo pone plazo al regreso de su amistad.
En las conversaciones con desconocidos los intermediarios más eficaces son la elusión y el silencio.
La poesía es un yo caligráfico, angustiado por su propia identidad.
La autonomía imaginativa del viaje precisa ángulos muertos, con inclinación a lo imposible.
El subconsciente poético confía en el potencial de los precursores.
El abismo genera puntos de fuga; el vértigo en las manos de un lugar que no existe.
José Luis Morante
![]() |
Lavado de cerebro Miguel Ángel Gómez BajAmar Editores Gijón Asturias, 2023 |
POSIBILIDADES DEL YO
JOSÉ LUIS MORANTE
Firma en la caseta de Anaya, 2012 FERIA DEL LIBRO DE MADRID |
VOLVER A LA FERIA DEL LIBRO
Las personales circunstancias de un viaje familiar y un problema de salud desasosegante han desaconsejado mi participación en esta edición de la feria del Libro de Madrid, aunque hubiera sido muy hermoso dar un toque de atención a los amigos y lectores, recordando la salida hace unos meses de Viajeros sedentarios (La Garúa, 2025), mi segunda entrega de haikus. También hubiera sido un gesto necesario despertar otra vez en los escaparates de novedades la edición de Paso ligero. La tradición de la brevedad en castellano (Siglos XX y XXI), mi ensayo sobre el aforismo impulsado por ediciones de la Isla de Siltolá y la colección de microrrelatos Fuera de guion, editada en Lastura en 2024. Son trabajos que definen la voluntad creadora de los últimos años y a los que estoy muy agradecido.
En
el ambiente catastrofista de los últimos meses, el otro
gran enemigo de la feria, la inestabilidad climática, siempre genera una inquietud de paraguas abierto. De momento, la lluvia ha respetado el
normal desarrollo de las firmas previstas y solo un episodio de calor extremo ha provocado el cierre de casetas una tarde, cuando la previsible afluencia del público de fin de semana era realmente llamativa.
La tradición del evento recordará con nostalgia a los autores ausentes que marcaron época: Mario Vargas Llosa, Javier Marías, Almudena Grandes y un amplio abanico de escritores mediáticos y populares que durante años concitaron abrumadoras colas de espera.
Son tantos los días de firma en los últimos años, que no sabría cuál recordar con especial cariño: la antología Re-generación (Valparaíso, 2016), Aforismos e ideas líricas de Juan Ramón Jiménez (2019), las ediciones críticas sobre sobre Luis García Montero, Joan Margarit y Eloy Sánchez Rosillo, en la caseta de Anaya-Cátedra, o el pasado año en la caseta de Lastura con Lidia López Miguel presentando los microrrelatos de Fuera de guion a un buen número de paisanos, poetas amigos y compañeros de la vida cultural de nuestro municipio. Cada ambiente en la evocación, plasmando dedicatorias y explicando el anecdotario de cada libro, es único e irrepetible.
Cuando
la desconfianza de los libreros en la situación económica del momento y la
implantación del libro digital parecían amenazar el tradicional mercado de
novedades, las cifras de venta superan expectativas de autores y
editores y un año más El Paseo de Coches del Retiro es marco propicio
para una cita que cuenta con un amplio respaldo entre los madrileños. Volver a la feria vale la pena.
José Luis Morante
![]() |
Luis Miguel Rabanal (Riello, león, 1957- Avilés, Asturias, 2025) |
![]() |
rascacielos de Tokyo Mayo de 2025 |
INVITACIÓN AL VIAJE
Vuelvo al viaje para crecer conmigo
y dormir la quietud que colisiona
con las abiertas rutas del asombro.
No sé plegar los mapas;
En sus signos transcurren
los lejanos entornos
y las imaginarias geografías que reclaman
el derecho a existir fuera de sitio.
Cuando cruzo la puerta,
aparezco de pronto allí donde no fui,
en la capa de polvo volandero
que precede al camino.
Tomo aliento y acepto
la invitación al viaje,
el exilio y la fuga.
En la distancia espera para andar
la brújula del aire,
una estampida que se multiplica,
donde ya se define lentamente
la frágil transparencia del regreso.
(Inédito)
En sus signos transcurren
los lejanos entornos
y las imaginarias geografías que reclaman
el derecho a existir fuera de sitio.
Cuando cruzo la puerta
aparezco de pronto, allí donde no fui,
en la capa de polvo volandero
que precede al camino.
Tomo aliento y acepto
la invitación al viaje, el exilio y la fuga.
En la distancia espera para andar
la brújula del aire,
una estampida que se multiplica
y donde se define lentamente
la frágil transparencia del regreso.
![]() |
Vocación de náufrago Nilton santiago Premio Juan Gil-Albert XLII Premios Ciutat de Valérncia Editorial Visor Colección Visor de Poesía Madrid, 2025 |