miércoles, 27 de septiembre de 2023

HOMENAJE ( A WISLAWA SZYMBORSKA)

Wislawa Szymborska
((Kórnik, Polonia 1923 -Cracovia, Polonia, 2012)
Premio Nobel de Literatura

 

HOMENAJE

            Cuando pronuncio la palabra futuro
        la primera sílaba pertenece al pasado

                        WISLAWA SZYMBORSKA

A espaldas del silencio
las palabras despeinan su rocío.
Si digo más
bajo la piel escucho sementeras
y afán de amanecer.
Pronuncio pájaro
y niego las escamas y el latido branquial.
Musito brizna, hormiga, topo,
abeja, grillo y se expande un terrario
inadvertido, vulnerable a la luz, ladera arriba.
Acerco al labio las sílabas de plato
y el paladar saliva perejil.
Cuento idas, regresos
y los pasos contienen urgencia y lentitud en el repliegue.

Mis palabras orean
la azarosa secuencia de los signos;
los hábitos insomnes que reiteran
un equilibrio frágil 
que alborota en los nombres su verdad.
Si pronuncio Wislawa
transfiguro las letras del asombro
y aparece en silencio,
con su hocico de liebre,
el instante final de este poema.

       (De Nadar en seco, 2022)







martes, 26 de septiembre de 2023

EL TIEMPO A SORBOS

Latidos
Fotografía
de
Internet

 

A SORBOS

 

JOSÉ LUIS MORANTE

                                                                                                

Todo es siempre menos 

JRJ

 

 
Extremó la prudencia verbal; no aventura palabras si no es en presencia de su diccionario.
 
***
 
Afrontar sin amargura, sin gestos de abandono,  que lo que pensamos oculta lo que somos.
 
***
 
Su cerebro contiene dos ideas; son tan opuestas que entre ellas cabe un sistema filosófico.
 
***
 
Al florecer el día  rompe la quietud del reloj un aforismo. Sorbos cortos.
 
***
 
Basta mirar la penumbra de alrededor para saber que no estoy.
 
***
El puño cerrado de quien corta rosas.
 
***
 
Una pobreza de hospitalidad irrefutable, capaz de ofrecer su vieja cama de faquir.
 
***
 
El silencio y su fuerza de convicción. Sabe quién responde cuando nadie llama.
 
***
 
 
El prudente convierte en coma cualquier punto final.


(Migas de voz, 2020)




lunes, 25 de septiembre de 2023

CARMEN PALOMO PINEL. EN TU ESPALDA EL DESIERTO

En tu espalda el desierto
Carmen Palomo Pinel
XLI Premio Leonor de Poesía 2022
Ediciones de la Diputación Provincial, Departamento de Cultura
Soria, 2022 

        

 
       
DEVASTACIONES
 

 
   El mapa literario generacional siempre traza sus coordenadas referenciales aquejado de urgencia. Así, desde el fragor de la inmediatez, se hace visible la línea medular de una nómina poética que, tras el acomodo, suele repetirse en estudios críticos y antologías, de modo esquemático y ambiguo. Es tarea del lector recuperar en ese sedimento colectivo las ausencias, aquellos nombres de interés que quedaron a trasmano o llegaron tarde a la foto de grupo y que, sin embargo, protagonizan travesías en solitario donde es patente la calidad y la singularidad de una estética personal.
   Carmen Palomo Pinel (Madrid, 1980) es profesora de Derecho Romano  y compagina la docencia con una travesía lírica que integra las entregas Glosas al fuego (2016), Las costuras del hambre (2019), Un silencio habitado (2021) DIDO (2021) y Madre de cenizas (2022), una amplia cosecha en menos de una década refrendada por importantes certámenes nacionales.
   La escritora presenta, tras ganar el XLI Premio Leonor de Poesía de la Diputación de Soria, la entrega En tu espalda el desierto, una compilación de poemas que deja en su umbral citas de Paul Valéry y Jorge Luis Borges. En el apartado inicial “De la vida” sedimenta una perspectiva intimista que incide en la sumisión de la mirada a un ámbito sombrío; el verso se convierte en enunciado de  incertidumbre, en un descenso hacia la soledad en el que se hace tema substancial, orilla y esperanza, la presencia del otro. Lo cotidiano es pura existencia; aglutina carestía, extrañeza e indagación en el sentido último de lo volátil a través de una compleja broza de signos donde sobrevive el amor, ese proceso que enlaza luz y noche, desierto y ceniza.
  Carmen Pinel acumula en la puesta en escena del poema una estela de imágenes  que muestra su capacidad onírica. Une la reflexión sobre el decurso de la experiencia vital con abundantes referentes culturales. Siempre perdura el afán cognitivo del lenguaje, la palabra poética trasciende la realidad, multiplica símbolos y disuelve referencias. La escritura no se deja llevar por la inercia de lo enunciativo; incide en una visión lírica que se expande también a través de la prosa poética, como sucede en el poema “¡Nos atacan!, una composición que alienta el barro magmático de asociaciones sorprendentes.
   Hay poemas muy breves que recuerdan con sus mínimos vislumbres al aforismo, un decir conciso de confluencia que enlaza discurso reflexivo y poesía. Lo ratifican algunos ejemplos verbales: “Y qué celebración cuando la jaula / logra escapar del pájaro”.
   El segundo bloque poético “Del amor” perfila un contexto personal de cántico y celebración a partir de la presencia del amado; su cercanía borra suturas, somete a una feliz ceguera que ignora devastaciones e inquietudes. Los sustratos reflexivos sedimentan su calma. El poema resalta la vertiente lírica del entorno cuando el amor se hace presencia sanadora y zarandea la piel de la contemplación como una música intangible, como una lumbre que enciende su calor en el invierno.
  “De las palabras” se denomina el apartado final. El poema vuelve los ojos hacia sí mismo para configurar una poética que explore la complejidad del lenguaje para moldear significados: “Pero este poema es también parte / de aquella paradoja de lo humano / que se busca a sí misma / en un deseo / virado a lo imposible”.
   Sorprende en esta sección el poema “Un texto implícito” en el que lo visual adquiere rango y se completa con unas notas a pie de página que esencializan y reducen lo descriptivo para demorar el pensamiento y dar paso al sentido.
  En tu espalda el desierto profundiza en tres motivos de amplio recorrido literario –la existencia, el amor y la escritura- y confía en la decantación y concisión de la palabra y en su misteriosa capacidad para buscar sentido, para cobijar la poesía como forma de visión donde se manifiesta lo que ha estado oculto entre las sombras.
 
      

                                                      JOSÉ LUIS MORANTE



    

domingo, 24 de septiembre de 2023

OJO SIN FONDO

Catarata
Archivo
de internet

 

OJO SIN FONDO

 Todo se precipita en un ojo sin fondo 

OCTAVIO PAZ

   Se desplegó la luz entre la noche inmóvil y me desperté. La inocua claridad mostró un espacio todavía sin nadie. Indeciso, comencé el día buscándome.

 

(De Cuentos diminutos)

sábado, 23 de septiembre de 2023

MIGUEL CATALÁN. EL ÚLTIMO PELDAÑO

El último peldaño
(Miscelánea)
Miguel Catalán
Edición de María Picazo y José Luis Morante
Editorial Verbum
Madrid, 2022

  

EVOCACIÓN Y MEMORIA


   Los pasos literarios de Miguel Catalán (Valencia, 1958-2019) no atardecen nunca; cruzan el tiempo una y otra vez para enlazar pretérito y ahora. Y buena parte de esta continuidad en el discurrir temporal se debe a la prolongada vigilia de María Picazo, esposa del escritor y perenne colaboradora en las contingencias del taller creativo. 
   Gracias a su empeño y a su idea germinal coge vuelo El último peldaño, entrega de esqueleto flexible que es, sobre cualquier otra circunstancia, evocación y memoria, mediodía compartido; homenaje coral a la presencia referencial de Miguel Catalán, aunque la difusión de su obra y el lugar asignado en las primeras filas, estén todavía por llegar. Avalan su centro escritural cinco novelas, tres compilaciones de cuentos breves, el material filosófico de Seudología y los dos diccionarios, Diccionario Lacónico y Diccionario de falsas creencias, junto a la literatura hiperbreve compilada en la editorial Trea en 2019 con el título Suma breve y en el libro póstumo Suma y sigue (Libros al Albur, 2019)Me apresuro a exponer por su interés los contenidos compilados en esta obra singular. La parte esencial del libro y su trayecto de amanecida compila los aforismos póstumos ya citados de  Suma y sigue (2019), que vieron la luz por primera vez al cuidado de José Luis Trullo. María Picazo ha rescatado entre el material inédito del escritor los aforismos inéditos de Pasos sueltos, un conjunto de textos escrito cuando la enfermedad prodigaba síntomas y sombras, condicionando el estar diario de quien hizo de la serenidad y la aceptación una actitud. El cáncer estaba ahí y era el momento de exprimir cada instante con la sed vital de lo necesario: el amor de María, la atención plena para concluir los proyectos en marcha y las relaciones de intimidad y gratitud con el grupo de amigos que siempre admiró su talento literario y su altura ética.  Si es conocido por todos el perfil polivalente del filósofo y su versatilidad para la práctica de estrategias expresivas como el ensayo, la novela, el relato, el aforismo y la crónica periodística, será una sorpresa general la inclusión de un puñado de poemas de amor en el apartado Poemas de la fascinación, donde  el amor, como semilla verbal y fe de vida, se impone en cada texto para definir, una vez más, el enlace irrompible con María Picazo “desde antes y después”. Solo la clara sintaxis del amor nos salva y esa es la señal más definitoria del pensar poético de Miguel Catalán, quien asume la condición de amante y compañero como una fuerza sustantiva y esencial en sus relaciones con la propia identidad. La respuesta a la invitación de María Picazo para participar en este territorio de afectos fue tan rápida  que hubo que acotar los textos enviados para evitar la dispersión y mantener la textura evocando a Miguel Catalán con diagnósticos independientes. Por ello, Ronda de abrazos incluye evocaciones intimistas (Alejandro Aguilar, Alberto Gimeno, José Payá Beltrán, Antonio Saurí, José Miguel Segura Roselló, Tirso Priscilo Vallecillos García), aproximaciones literarias (Francesc Arroyo, Hiram Barrios, Carmen Canet, José Félix Escudero, Pedro García Cueto, Luis Veres, Javier Paniagua, José Vicente Peiró, Justo Serna), semblanzas de la relación afectiva y memoria personal del trayecto común (Raquel Díaz Seijas, Gloria de Frutos, Francisco Javier Gallego Dueñas, Daría Rolland Pérez y Jean Claude Rolland, Luis García-Chico, José María Martínez Selva, Miquel Martínez, Blanca Rodríguez López); aunque en casi todos los textos se hace patente el epitelio existencial del escritor y su calidez humana en el trato, como si fuese inevitable, junto a la admiración intelectual, el sello humanista y ético de una identidad comprometida con la hondura de pensamiento y con una ejemplar propuesta de vida. Miguel Catalán sigue entre nosotros. Sigue la fuerza de su obra magna, Seudología, un compendio de volúmenes con la mentira como núcleo argumental, que no tiene parangón en nuestro ámbito literario; y siguen sus aforismos como abrazo entre filosofía y cauce lírico y como constatación de un tiempo de certezas líquidas que busca en lo fragmentario una indagación de sentido, un norte, unas coordenadas con criterio crítico. La recopilación El último peldaño, tan bellamente editada por Verbum, la editorial madrileña donde el escritor encontró la mayor hospitalidad para sus trabajos de creación e investigación filosófica, es el epílogo abierto de un itinerario lúcido y pleno. En sus páginas queda el vitalismo creador de Miguel Catalán, la fertilidad de su obra y la impresión de que su magisterio ha marcado un tiempo de paredes firmes que prolonga sus voz frente al olvido.                              
 JOSÉ LUIS MORANTE


                                                                                                                      

viernes, 22 de septiembre de 2023

HUGO MUJICA. EN UN RÍO TODAS LAS LLUVIAS

En un río todas las lluvias
Hugo Mujica
Editorial Visor
Colección Visor de Poesía
Madrid, 2022

 

SEDUCCIÓN DEL SILENCIO

 

   Sacerdote, ensayista y poeta, Hugo Mujica (Buenos Aires, 1942) compiló su aporte lírico de amanecida en Poesía completa. 1983-2004. Aquel balance consiguió una recepción insólita que impulsó cuatro ediciones vendidas en un corto paréntesis temporal. Así toma cuerpo, con vocación tardía, un discurrir fecundo que muestra una insólita madurez expresiva en las entregas Y siempre después del viento (2011), Cuando todo calla (2013), título reconocido con el Premio Casa de América de Poesía Americana), Barro desnudo (2016), A las estrellas lo inmenso (2019)  y En un río todas las lluvias (2022).
   Son estaciones de un trayecto que han configurado, desde una dicción concisa y reflexiva, un ángulo de visión que entrelaza espiritualidad y despojamiento; que anuda en el lenguaje la seducción del silencio. Un silencio que emana del camino personal del autor y de su experiencia biográfica. El poeta vivió durante siete años en un monasterio trapense y fue allí donde comenzó a escribir poesía. La voz poética impulsa una hermenéutica de lo esencial. Una propuesta de transcendencia. Lejos de la digresión enunciativa, anecdótica y y confesional, la palabra de Hugo Mujica no busca respuestas; es una indagación pausada en el misterio que se convierte en una de las preocupaciones centrales del escritor. La poesía no dibuja la realidad, se demora en sus indicios para percibir su razón de ser. Escucha lo que las palabras no dicen en un brotar inasible que lleva a un proceso de autoconocimiento y abstracción. De ese aprehender emerge la poesía, el paso inadvertido del inicio.
  Desde los versos iniciales, Hugo Mujica enfoca el poema desde la mirada interior. Quien escribe se recoge en sí mismo, no para nombrar sino para escuchar; para intuir más allá de quien hilvana percepciones. Con escueta dicción, el poema alumbra; asume que la esencia habita en la paradoja y la interrogación; la quietud de los elementos despliega ecuaciones sin resolver que acaban fundiéndose en la quietud: “Hay palabras /    que son el silencio / de lo que ellas mismas / dicen/      dicen raíz /     no follaje”. Lo real muda en lo inasible interior; se asienta en los pliegues de la luz, activa un instante de vida que hace de la chispa plenitud y cumplimiento. Hay una confluencia entre lo que llega y lo que pasa, un umbral, una línea de cruce. Entender el poema es rozar su significado: “Al escribir con la mano / la mano es la que / enseña, /    pero lo aprendido / se muestra solo al final: / es lo que fuimos / borrando.”
  El sujeto poético no se muestra; sólo se hace vislumbre. Está ahí para buscarse en el fluir del pensamiento que quiere convocar al lenguaje. Quien escribe escucha; se hace indefinición porosa que aloja exploraciones capaces de captar el silencio; con su desnudez las voces vivifican y sostienen el cuerpo de lo nombrado. El poema es un tapiz propicio donde adquiere mucha importancia la configuración de los espacios versales. Conforman una partitura fragmentaria.
  Los versos quiebran la frase, alojan tras las imágenes su propósito de  desnudar al silencio del silencio. Desde el interior de los significados nace la hondura, todo ese instante que de pronto es nada, una vibración que enciende luz dentro del párpado.


 
JOSÉ LUIS MORANTE
 
 
 


jueves, 21 de septiembre de 2023

EL SUEÑO DE LA SECUOYA

Secuoyas
Fotografía
de
Revolución Natural

 

El sueño de la secuoya

 

 Ya despierto, espera unos minutos para abrir los ojos. Esta noche en la minuciosa paciencia de su sueño ha crecido en el jardín una secuoya. Se despereza de inmediato. Sale alborozado a la terraza donde parpadea de sorpresa y emoción. La enorme arquitectura vegetal está allí y su sombra recubre casi a toda la casa. Da un par de vueltas al imponente tronco, contempla la corteza… Poco después escucha  el ruido de un pensamiento práctico: tal vez sea mejor que la próxima noche sueñe con arbustos.

(De Cuentos diminutos)