Entrevista
a JOSÉ LUIS MORANTE, antólogo de Re-generación
Una vez más tengo el placer de
entrevistar a José Luis Morante (Ávila, 1956), poeta y crítico literario. Ahora
con motivo de la salida de Re-generación,
Antología de poesía española (2000-2015) de Valparaiso Ediciones. En ella selecciona 24 voces cuyas edades oscilan entre los 23 y los 35 años. Voces
que, a pesar de su juventud, irrumpen con fuerza en el panorama literario.
DOLORES LEIS: Si
no recuerdo, es tu cuarta antología y a diferencia de las anteriores no
sólo has tenido que seleccionar los poemas, sino también los poetas…
J.L MORANTE:
Así es, pero son iniciativas muy distintas. Antologué a poetas con un fin
solidario, tras los atentados de Madrid, o a participantes en la vida cultural
de Rivas, pero Re-generación es un inventario de estéticas emergentes que ha exigido mucha más lecturas porque dibuja el
paisaje lírico de la última hornada.
¿Qué
criterios has seguido como antólogo para elegir los 24 poetas de Re-generación?
Su
calidad literaria. Ser autores de unas obras relevantes en la que se constata personalidad propia y talento poético.
¿Te
dejas llevar por la intuición y los sentimientos, o prima una biografía con distintos
premios literarios en su haber?
Aquí la
intuición no sirve como brújula; las biografías se construyen con libros y a
veces esos libros son reconocidos en certámenes literarios, pero no es una
condición imprescindible. En cambió si me parece una señal de calidad la
presencia en editoriales fuertes, los comentarios de otros críticos, o las
impresiones de sus libros tras la lectura.
¿Qué
descubrimientos te ha permitido la lectura de tanta poesía joven?
Tengo la
sensación de haber realizado un largo viaje lleno de rincones inéditos. Así que
el asombro me dura todavía y con él la certeza de que vivimos un momento
creativo de primera magnitud, con poetas que serán una presencia viva en el
futuro.
Los autores nacieron en los ochenta y principios
de los noventa ¿Qué te impulsó a elegir ese periodo en concreto?
Apenas
existen antologías de este último tramo temporal en el que nacieron los poetas
que escriben en el siglo XXI. Y quería trazar un mapa lírico remozado, hecho
con tinta fresca, a plena luz, como si asistiésemos a una representación que se
está realizando todavía: poesía in
progress.
Trece años los separan, ¿por qué esa diferencia generacional entre
unos y otros?
Como sabes, el
tiempo generacional canónico agrupa quince años, pero la verdad es que no he
encontrado poetas de 1994 y 1995 que superaran a sus compañeros de promoción y
opté por incluir más autores de los años ochenta. Es normal; no es fácil con
veinte años firmar un hito literario, más bien el primer libro suele ser un
sondeo, una especulación que afina la voz.
En el prólogo cuentas que has elegido
protagonistas con amplia formación universitaria, ¿crees imprescindible pasar
por la universidad para escribir poesía de calidad?
Soy profesor
desde hace treinta y ocho años y sé, por experiencia, que el aprendizaje
cultural es una columna de la creación. No es necesario tener un título
universitario, claro que no –y la historia está llena de excelentes poetas sin
acreditación universitaria- pero la cultura siempre proporciona cobijo y
sombra, terreno fértil y cielo despejado.
El individualismo de las redes sociales
hace que las llamadas generaciones literarias tiendan a desparecer ¿qué
elemento común hay en los poetas que aglutinas en esta muestra?
Es indudable que
nuestro tiempo está marcado por lo digital; hay una profunda conexión entre
literatura y espacio virtual, que ha permitido una mayor difusión y un entorno
global muy amplio; también el legado de la tradición ha multiplicado sus sendas
y los idiomas hablan entre sí con más fluidez que nunca.
Me llama la atención la procedencia de los
autores, aunque están repartido por toda la geografía hay dos comunidades que
priman, Asturias y Madrid, en relación a la primera ¿qué diferencia la poesía
asturiana para, aún siendo una comunidad pequeña, haya tanto poeta?
Asturias vive
una cosecha ejemplar a la que no es ajena la influencia de José Luis García
Martín. Hay revistas que sirven de coordenadas básicas a los nuevos nombres
como Clarín y Anáfora. Pero no es el único territorio en el que la poesía recorre
las calles con luz de mediodía: Granada, Albacete o Madrid son topónimos
repletos de excelente poesía…
Puentes
de papel es tu blog literario, un escaparate donde muestras al lector tus
opiniones, tus vivencias, tu poesía y relatos, un espacio que llega a un gran
número de personas que de otra manera no leerían a José Luis Morante. ¿Es
imprescindible un blog en la vida del poeta?
Mi relación
personal con el blog es casi la de una pareja de hecho. En estos años, se ha
convertido en el mejor difusor de mi escritura; por tanto, es muy útil para
sostener un intercambio cultural con lectores lejanos que gracias a esos
puentes digitales acuden a casa cada día. También las redes pueden cumplir un
papel similar. Mantener el blog con entradas de interés es un reto, exige
tiempo y dedicación y yo estoy muy agradecido con la presencia de tantos amigos.
Quiero agradecerte la posibilidad que me
brindas de colaborar nuevamente contigo, por abrirme las puertas (en esta
ocasión virtuales) de tu casa y compartir en la lejanía nuestro eterno café. Te
deseo lo mejor en esta andadura y en todas las que emprendas en los días
venideros.
Dolores Leis es novelista. Su primera obra, El último Bernal (Círculo rojo, 2013), cimentaba su apuesta narrativa en las aguas
de un realismo neorromántico. Su segunda salida, El pasado en cada esquina (Vitruvio, 2015) elige como marco histórico el primer
tramo del siglo XX. Ha escrito también poemas y microrrelatos. Desde hace algún tiempo
vive en Santiago de Chile, donde prosigue su vocación creadora y escribe su tercera novela.
(La foto de Dolores Leis es de Pilar Escamilla)