Félix J. Palma (ed)
Fábulas de Albión, 2012
En el preliminar, Félix J. Palma, editor y coordinador de esta antología
de relatos, aporta una definición elemental del steampunk que facilita el acercamiento del lector; el subgénero de
la ciencia-ficción mira en su origen la novelística de Julio Verne y H. G.
Wells para incidir en aspectos derivados del positivismo científico, la
revolución industrial, la popularización de las máquinas y la confianza en la
ciencia como dispensadora de utopías al alcance de la mano. Son señales
recurrentes que los autores escogidos concretan con los caracteres singulares de
su taller.
El narrador burgalés Óscar Esquivias elige un argumento en el que
prevalece un entorno musical para un cuento largo que entremezcla culturalismo,
humor y truculencia. Pese a la oposición familiar, un estudiante sólo ve en su
futuro sitio para la música y a esa obsesión creadora subordina su moralidad y
su conducta. Fernando Marías hace justicia al western, un género
cinematográfico de culto y crea un espacio de personajes extremos y tramas
exaltadas, con acción continua y diálogos lacónicos, contagiados por la aridez
del paisaje. Un pilar básico de esta filmografía, Clint Eastwood inspira la
personalidad del protagonista. El cuento no es sólo un homenaje al western sino
una muestra de excelente resolución argumental. La elaboración de José María
Merino insiste en el análisis lógico de lo real. El pensar cartesiano razona
sobre la proliferación de artilugios impulsados por el vapor y los efectos de
su empleo diario en el ser colectivo; la evolución tecnológica revoluciona el
sentido del tiempo: llegan la prisa y la deshumanización. “London Gardens” el relato de
Juan Jacinto Muñoz Rengel supone la existencia de vida inteligente en el
planeta Marte y el estudio científico de muestras plantea
interrogantes capitales, como la naturaleza de otras vidas y sus caracteres
científicos. El estilo documental del cuento sugiere un tono científico.
Andrés Neuman anticipa un futuro de autómatas, perros digitales y
tiendas virtuales para una cuenta atrás en la que el planeta inicia un regreso,
tras un atentado terrorista global, que lo reinstala en la amanecida de la
imprenta. La destrucción de un modo de vida obliga a una refundación que
soporta una pautada selección natural de la que no está exenta la cultura y el
libro escrito, que multiplica sus efectos propagadores.
El ambiente decimonónico de los barcos de vapor del Mississippi empapa
la propuesta de Fernando Royuela. Su cuento, “Flux” mexcla episodios históricos
de la guerra carlista, anédotas de tahúres que apuestan todo a la incertidumbre
del naipe y la sorprendente presencia de artefactos a vapor, impulsados sobre
el cauce del Guadalquivir.
Luis Manuel Ruiz firma el relato “Dynevor Road” cuya trama encara una
indagación en la locura, esa enfermedad que cobija los misterios del alma y los
espasmos de la inteligencia. Una extraña máquina para la experimentación tiene
efectos nefastos en los científicos que la emplean. El accidente genera una
desolación que unifica el pasado y el presente.
En “Aria de la muñeca mecánica”, Care Santos propone un largo viaje al
mundo de los deseos cumplidos a partir de la llamativa colección de autómatas,
concebida para el espectáculo y para satisfacer los requerimientos de los
usuarios en su búsqueda de la felicidad. José Carlos Somoza opta por el formato epistolar. La carta “That way
wadness lies”, una expresión que W. Shakespeare utiliza en El rey Lear sugiere dónde reside la locura y se convierte en una
ordenada exposición sobre una peculiar cámara fotográfica que retrata espíritus
y somete a quien la emplea a experiencias extremas de contemplación de
espectros móviles. Ecos al fondo de los mundos de Lewis Carroll.
Una historia de vampiros es el relato seleccionado de Ignacio del Valle.
En el tiempo de espera para actuar sobre una nueva víctima, Marcio indaga sobre
la relación diaria de los seres humanos con la angustia y la erosión del
cuerpo, en un terco proceso que nunca se detiene.
Corresponde a Pilar Vera un cuento sobre la madurez, sobre esa actitud
que desconfía del progreso y su capacidad de transformación de tiempos y
espacios reales. En un extraño estudio fotográfico un joven fotógrafo se afana
en retratar fallecidos en su perfecta quietud; sin embargo las placas no
muestran lo que ve.
Cierra la muestra Marian Womack con un cuento sobre una experiencia
bélica de hombres alados, barcos voladores y globos aerostáticos. Es la
historia personal de un fracaso que intenta recomponer su existencia en otro
espacio y que en su itinerario va recibiendo nuevas señales que lo conducen
hacia un desolador destino final.
Los
textos de esta compilación comparten el optimismo sociológico de la revolución
industrial y el afán expansivo de la época victoriana. El intelecto humano ha
sido capaz de inventar la máquina y su uso generalizado hace posible un mayor
dominio de la realidad. La máquina establece una relación de proximidad con lo
imposible, ya sea un viaje al fondo del mar, la conquista interestelar o el
ensanchamiento geográfico del planeta. La ciencia y la razón firman una alianza
de progreso, así que ¡ más madera!
Pues, después de lo escrito, me apetece un montón leer esta antología de cuentos retrofuturistas.
ResponderEliminarLa selección tiene la garantía del editor, Félix J. Palma, por quien merece la pena introducirse en el género. Todavía no he olvidado la gratísima impresión que me produjo su novela EL MAPA DEL CIELO.
ResponderEliminarNos vemos esta semana. Un beso fuerte hasta entonces.
Una grata sorpresa este libro que presentas, un estilo totalmente distinto al que nos tienes acostumbrados... espero poder leerlo en breve.
ResponderEliminarun abrazo.
Es verdad, la ciencia-ficción no ocupa demasiado sitio en mis estanterías... pero muchos de sus nombres (Óscar Esquivias, Fernando Marías, Félix J. Palma, Andrés Neuman...) si son habituales espacios de lectura en novela, relato o poesía. Los escritores no ocupan una sóla habitación en la literatura; los pasillos de la creación los llevan a muchas puertas por abrir.
ResponderEliminarUn cordial saludo.