Rivas, una mirada escrita
VV. AA.
Ediciones ER, Rivas, 2012
Siempre que arranca un proyecto editorial no cabe sino agradecimiento a los impulsores de la iniciativa por su valentía ante la compleja situación económica, al no hacer de la rentabilidad del mercado el único itinerario a seguir. Los responsables de esta senda por el barrio de las letras son Elena Muñoz, empresaria y gestora cultural, bien conocida por su implicación coordinadora en ciclos como las Jornadas de Historia de Madrid, la revista digital de autores locales, o el Café Literario de Covibar, y José Guadalajara, novelista, promotor y cabeza visible de la asociación de escritores ripenses. Les corresponde a los dos el mérito de organizar y ofrecer cobertura a esta mirada múltiple que da el primer paso del catálogo ER.
Se trata de un volumen de llamativa cubierta; un ojo captura un reflejo especular. En él el aparatoso monolito de la entrada parece un detalle estético. El libro aglutina catorce cuentos breves de voces vinculadas con Rivas-Vaciamadrid, una población periférica del sureste de la Comunidad de Madrid. La edición cuenta con un poético liminar de José Guadalajara y con ilustraciones de Sergio Guadalajara, realizadas para acompañar la nota biográfica.
Todos los cuentos comparten el escenario narrativo: el callejero urbano, los rincones que sugieren un lugar habitable, una ciudad abierta a lo posible y a lo imaginario. De este modo se fusiona la realidad de un entorno reconocido por los naturales del lugar y la ficción argumental del escritor.
El trabajo aporta frutos diferenciados y sensibilidades dispares, pero permite tomar el pulso a la nómina de autores presente en un espacio geográfico que, desde que iniciara su cambio demográfico, en el arranque de los años ochenta, ha hecho de la cultura uno de sus valores más arraigados.
Al ser un núcleo poblacional moderno, los sitios escogidos no destacan por su singularidad arquitectónica sino por ser enclaves de referencia que toman el pulso a la vida urbana de una ciudad dormitorio. Queda la historia, el municipio original es bastante antiguo y ya se hallan referencias a Rivas en las relaciones topográficas de Felipe II. El paso del tiempo y la guerra civil, con el cerco a Madrid y la batalla del Jarama, borraron rastros.
De plena actualidad es el paisaje con figuras que se relata en páginas que dejan sitio al auditorio Miguel Ríos, al Parque del Sureste, la oficina de correos, el Cerro del Telégrafo, la biblioteca del centro Cultural Federico García Lorca, El Cristo de Rivas, el Parque Lineal, el monolito de entrada, la estación de metro, o la superficie consumista de los centros comerciales... Son lugares conocidos en los que se transita a diario de manera mecánica, donde aparentemente no cabe el sobresalto y sin embargo esconden tras la esquina la sorpresa que revitaliza los sentidos de sus transeúntes habituales.
En estas ambientaciones se desarrollan breves relatos que ensayan distintos enfoques: el tradicional relato de tesoro convive con una narración sentimental, o con un relato jalonado por la ironía, o con historias que hablan de soledad y desdoblamiento.
Cada ciudad requiere para conocer su callejero la complejidad de una caligrafía, que acumule detalles de su latido diario. Catorce retinas guardan esta imagen de Rivas y el círculo cerrado de su realidad y su apariencia Dan al lector una exacta muestra de una plataforma de escritores que busca sitio en el poblado ensanche de la literatura contemporánea.
Gracias por tu apoyo, que sentimos físicamente el día de la presentación y ahora a través de tu análisis de esta primera obra de Ediciones ER. Es muy importanto que en tu blog, Puentes de Papel, por el que pasan tantos títulos importanres, hayas hecho este hueco de amistad y literatura.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte.
Querida Elena, la literatura es tan importante en mi vida que sería imposible no ver las posibilidades que ofrece una colección editorial en nuestro municipio. Sé que en tus manos están garantizadas la calidad y el rigor, dos notas básicas para que el catálogo se consolide y perdure.
EliminarUn abrazo para ti y mi gratitud como escritor y como amigo.