Con ojos de niebla |
COPLILLA DEL DESCONCIERTO
La vida es una historia contada por un idiota,
llena de estruendo y furia
W. SHAKESPEARE
No. No pretendo
comprender lo que piensa
mi desconcierto.
¡Eso está bien!, deberíamos hacerlo todos, así no nos volveríamos locos.
ResponderEliminarAbrazos.
Vaya, Tracy, no creo que haya una lectora tan comprensiva y tolerante como tú; debería compartir contigo tertulia matinal y biblioteca para fortalecer optimismo y fe en lo cotidiano. Besos.
ResponderEliminarmuy mal José Luis, desconcierto, ahí solo y desamparado... pobrecito...
ResponderEliminarEl poeta es un fingidor, querido Chisme. El desconcierto no es cosa de la amanecida sino un traje de sesión continua. Abrazos con niebla.
Eliminar¿El desconcierto piensa o hace pensar?
ResponderEliminarCompañero de perplejidades, feliz coplilla.
Hola poeta, qué alegría percibir tu sonrisa sobre la barandilla digital de este puente. Queda poquito para poner término al curso laboral y literario. Así que salgo al día con los ojos de niebla del cansancio. pero estás cerca y la fatiga se desvanece en medio de la tarde. Besos y gracias.
EliminarNo es que uno no lo pretenda, sino que el desconcierto en algunos momentos, es muy difícil de comprender. La vida tiene contradicciones que nos desconciertan. Claro que, si no, todo sería muy fácil.
ResponderEliminarUn abrazo, José Luis.
El azar está cerquita siempre, querida amiga, y los ojos de la razón no tienen todas las respuestas. Un saludo en los últimos instantes del curso. Ya con sol de verano en las ventanas.
ResponderEliminarQue el desconcierto nos siga sorprendiendo, que para pensar ya estamos nosotros. Así se vive. Un abrazo
ResponderEliminarAsí se vive, Carmela, con esa inquietud que es también empuje y razón de vida para encontrar respuestas. Un fuerte abrazo. ya estamos en el final de curso y habrá más tiempo para el sosiego. Gracias por tu hermosa compañía.
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