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| Cascada del Caozo (Valle del Jerte, Cáceres) |
CICLO DEL AGUA
La
frágil transparencia de aquel río se confundía con su piel desnuda. Era una cualidad
que extremaba las sensibles respuestas a los cambios de temperatura. De
madrugada, el agua era sólida; con las primeras briznas de sol se licuaba y a
mediodía las altas temperaturas tejían en el cauce redecillas de niebla, en un
artesanal proceso íntimo de nubosidad variable.
(De Cuentos diminutos)
Muchos de los microcuentos que componen el libro en preparación "Cuentos diminutos" han sufrido en su proceso de escritura severas mutaciones. Algunas versiones permanecen intactas en el ordenador y de cuando en cuando las recupero a ver si funcionan... Es un asunto extraño porque a veces me dejan una mejor impresión lectora que la versión definitiva; así que vuelvo a empezar. Miro la geografía íntima del agua...
ResponderEliminarDeseando leerte en ese libro José Luis. Son cuentos diminutos, como tú dices, pero exquisitos. Me gusta mucho éste. Esa comparación del agua con la persona... en cada palabra la artesanía del lenguaje. Me encanta.
EliminarQuedo pues a la espera de tu libro.
Que tengas un finde chulo, chulo
Sandra.
Gracias querida Sandra, el libro de microrrelatos avanza muy lentamente. Deja sitio en la mesa de trabajo a la crítica literaria y a otras ocupaciones que siguen manando a cada instante. Pero espero de corazón que siga dándome sus leves frutos y será un placer enviártelo cuando esté... Así que ahora solo un ruego, un poco de paciencia; y feliz sábado.
ResponderEliminarCuidar el agua, ya sea entre versos, ya entre relatos, es una manera limpia y Serena de cuidar la vida. Sigue en tu fuente, amigo!!
ResponderEliminarLo haré encantado querido poeta, esta vez pensé en sus mutaciones y en simbología como fuente de vida. Y el campo se llenó de claridad. Un fuerte abrazo.
EliminarUna preciosa imagen arropada por unas bellas palabras.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias Tracy, aquí sigue lloviendo como si quisiese recuperar toda la belleza de otro tiempo.
Eliminar¡Ya quiero leer ese libro!
ResponderEliminarEl libro no existe todavía, poeta, va sumando textos pero supongo que para un libro completo es insuficiente ya que suelo dispersarme entre lecturas, poemas y afectos... Pero tiempo al tiempo, querida amiga, que llegará, como ha llegado abundante lluvia tras una larga sequía. Un fuerte abrazo.
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