miércoles, 2 de julio de 2014
CONFIDENCIAS.
CONFIDENCIAS
Para los que piensan que el futuro
está en alguna parte
En el bar de costumbre soy atento auditorio
de un borracho feliz, adolescente,
cuyo pulso derrama hermosas confidencias.
No son originales,
acaso no pretenden ser creídas.
En su infancia fue víctima de una escuela rural
-el asunto es común y se repite
con alguna frecuencia-
y aprendió a odiar los libros con un odio precoz,
como sucede siempre que aprendemos con sangre.
Memorizó de paso reyes godos,
algo de geografía,
la sibilina historia de Caín,
la prueba de los nueves
y el uso de la m delante de p y b.
Porque nada es eterno aquel encono
se fue desvaneciendo como luz de crepúsculo.
En un hipermercado -limpiando estanterías-
descubrió por azar
el polvo acumulado de los clásicos.
Aquel hallazgo fue clarividente:
quiere ser narrador, o siquiera poeta.
No pone a su deseo ningún sello de urgencia.
Que Cervantes escribiera el Quijote
a los cuarenta y tantos
le hace ser optimista.
Población activa, Gijón, 1994
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Social e irónico; cotidiano y descreído. Enhorabuena; José Luis. Han pasado veinte años y la vigencia anida hoy en este poema.
ResponderEliminarUna confidencia más, Luis, mi atasco de lecturas me obliga a sustituir las habituales reseñas por poemas de otros días. Si estos libros no muestran canas es una buena noticia. Y otra noticia excelente es que sigamos juntos en la amistad y en la literatura. Abrazos y no sabes cuánto agradezco tu comentario.
EliminarY yo tus palabras sinceras.
EliminarFeliz semana Luis, el viernes es siempre una propuesta de posibilidades. la mía está cercana: un largo paseo por Rivas, al caer la tarde y una terreza fresquita para el sosiego de la charla y la cerveza fresca. Abrazos.
EliminarConforme iba leyendo se iba dibujando una sonrisa en mi cara que no la he perdido a lo largo de la lectura, abundan esos personajes.
ResponderEliminarGracias, Tracy, por tu visita y por esa complicidad lectora hacia quienes buscan siempre lo mejor de sí mismos en alguna parte del porvenir. Que tengas un descanso provechoso y feliz.
EliminarPrecioso!
ResponderEliminarSobre todo optimista, querido Hilario, encontrar el futuro en una estantería atestada de polvo es una alegría. Tal vez esté cerquita y nos aguarde. Un abrazo y acusaré recibo de tu libro en cuanto llegue.
EliminarJosé Luis, he estado ausente unos días y me despisté de la lectura de tus siempre agradables escritos.
ResponderEliminarEste me gusta mucho.Nunca es tarde para amar los libros y el saber; el pretender que ese interés surja por la fuerza de la calificación escolar y las sanciones, no da resultado; sin embargo, puede surgir en la madurez cuando uno es capaz de apreciar el valor de la cultura y la satisfacción que proporciona.
Un abrazo.
El tiempo de los libros es personal; cada uno de nosotros llega en una edad y en una circunstancia concreta. Para mi inclinación lectora fueron esenciales los días colegiales y tengo un máximo respeto por aquellos maestros que pusieron ante mis ojos los primeros renglones. Para la lectura nunca es tarde y en la madurez la escritura puede ser una actividad gratificante.
EliminarBienvenida, Fanny, que tengas un verano provechoso y feliz.